La falta de financiación deja en el tintero las dos privatizaciones "estrella" del Gobierno

• Se retrasa la privatización de Aena y Loterías y Apuestas del Estado
• Aena prorroga tres meses la licitación de los aeropuertos de Barajas y El Prat
• CiU pide al PP que defina, de cara al futuro, el modelo aeroportuario que quiere
• La salida a Bolsa de Loterías: "Cuando las circunstancias sean más favorables"

Las dos principales privatizaciones puestas en marcha por el Gobierno, con las que esperaba obtener unos ingresos de hasta 14.000 millones de euros, acusan las dificultades de financiación de las empresas y la debilidad del sector bancario. La crisis económica no ha hecho distinción entre una empresa estatal deficitaria como Aena y la que ha reportado beneficios continuados durante más tiempo en España, Loterías y Apuestas del Estado.

El presidente de Aena (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea), Juan Lema, ha anunciado este jueves que propondrá al consejo de administración una prórroga de tres meses, hasta el 31 de enero de 2012, del plazo de presentación de ofertas para licitar la concesión de los aeropuertos de El Prat y Barajas.

En el caso de Aena, el Gobierno pretende dar salida a una empresa estatal deficitaria, que había registrado 377 millones de euros en pérdidas en 36 de los 47 aeropuertos españoles en 2010.

El Gobierno quiere dar entrada al capital privado hasta un 49% en Aena y en un 30% en el caso de Loterías y Apuestas del Estado.

El portavoz de Fomento del Grupo Popular en el Congreso, Andrés  Ayala, ha señalado que la decisión adoptada ahora sobre Aena demuestra que su  partido tenía razón cuando afirmaba que era un "despropósito".

Por su parte, el diputado de Convergencia i Unió, Pere Macías, ha calificado  la decisión como algo lógico y pide al Partido Popular que defina de  cara al futuro el modelo aeroportuario que desea, si uno centralizado  como hasta ahora u otro individualizado.

Escollo en el tramo final

El proceso de privatización se ha encontrado en su tramo final, en ambos casos, con el escollo de la crisis económica.

Aena Aeropuertos, la sociedad creada para la privatización de  Aena ha surgido con un patrimonio de 2.600 millones de euros y la licitación de los aeropuertos de Barajas y El Prat contempla la concesión del 90,05% del capital de las sociedades que exploten estos aeropuertos, con un canon de salida de 3.700 y 1.600 millones respectivamente.

Ferrovial y Acciona, empresas adjudicatarias por cinco años de la gestión de las torres de control de 13 aeropuertos, han acudido también con otras como FCC y Abertis, al concurso para la gestión El Prat y Barajas.

Han sido las propias empresas las que han solicitado una ampliación del plazo, por las dificultades encontradas para reunir la financiación necesaria en la fecha límite, el próximo 30 de octubre.

A pesar de estas dificultades, fuentes del gestor aeroportuario, han indicado a Efe que los consorcios interesados en esta licitación reiteran su interés en participar en el concurso y añaden que se mantienen las tanto las condiciones económicas como las técnicas.

Loterías, suspendida

El Gobierno anunció el pasado 28 de septiembre que suspendía la salida a Bolsa de Loterías y Apuestas del Estado, con la que esperaba obtener hasta 8.000 millones de euros. Según un comunicado del Ministerio de Economía y Hacienda porque "no se dan las circunstancias necesarias para garantizar unos ingresos  que reflejen el valor de la Sociedad Estatal para la Venta de Acciones  de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE)".

La salida a Bolsa de SELAE, que estaba prevista para este 19 de octubre, iba a ser la mayor en la historia de España, con un valor patrimonial que el Gobierno situaba en aproximadamente 21.000 millones de euros y un valor inicial en Bolsa de 12.000 millones de euros.

En este caso, el Gobierno esperaba conseguir unos ingresos proporcionales al valor de la empresa española que ha generado beneficios continuados durante más tiempo.

La ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, aseguró un día después de la suspensión, que decidieron frenar su salida a Bolsa porque "los inversores institucionales ofrecían un precio" que no han querido admitir. Sin embargo, el Gobierno reitera que es "un valor seguro" y que su salida a Bolsa se producirá cuando las circunstancias de mercado sean más favorables.