Bruselas quiere prohibir que las agencias califiquen a los países rescatados o en crisis
- Las agencias no podrían calificar a Grecia, Portugal e Irlanda, como mínimo
- La Comisión culpa a las agencias de agravar la crisis económica
Ver también: Especial crisis de deuda en Europa
La Comisión Europea (CE) está estudiando dar capacidad al regulador europeo para que pueda prohibir temporalmente a las agencias de calificación revisar las notas de países que pasan por apuros o que han necesitado de un rescate financiero. Así lo ha asegurado en una rueda de prensa el comisario europeo de Mercado Interior, Michel Barnier, quien ha confirmado que presentará un nuevo paquete de regulación de las agencias en noviembre.
"Creo que es legítimo dar un trato especial cuando un país está en negociación o está cubierto por un programa internacional de solidaridad", ha explicado el comisario, que ha defendido la opción de "prohibir" o "suspender" las calificaciones en momentos concretos. En estos momentos, este sería el caso de Grecia, Irlanda y Portugal, que han visto cómo su deuda se considera bono basura a pesar de contar con el respaldo de la UE y el FMI.
Pero el plan es más ambicioso y valora la posibilidad de que los países en crisis o en apuros económicos tampoco sean valorados, si bien no se ha especificado qué datos macroeconómicos deben darse para que un estado tenga esta consideración.
Las agencias, culpables en parte de la crisis
Según fuentes comunitarias, la idea de que las agencias no califique a los países intervenidos o en crisis se está "considerando activamente de cara a la próxima ronda de regulación para las agencias de calificación", que, como ha indicado Barnier, llegará en noviembre. El plan pasaría por dar poder a la Autoridad Europea de los Mercados de Valores (ESMA, en inglés) para "prohibir temporalmente" las calificaciones "bajo circunstancias específicas", han explicado esas mismas fuentes.
Éstas podrían incluir situaciones con posibles "consecuencias para la volatilidad o la estabilidad financiera" o en caso de que el análisis pueda verse afectado porque un país "está en negociaciones de un programa de asistencia financiera".
Barnier ha vuelto a culpar en parte a las agencias de calificación del inicio de la crisis financiera, pues éstas "no vieron a tiempo" el problema e hicieron un "mal análisis de los riesgos".
"No es el termómetro el que causa la fiebre, pero el termómetro debe funcionar correctamente para no exagerar la fiebre. Debe medir la temperatura bien, con exactitud y en el momento adecuado. Y este no ha sido siempre el caso", dijo el comisario.