EE.UU. acusa a China y Rusia de ciberespionaje
- Un informe oficial asegura que roban secretos comerciales y tecnológicos
- Afirman que supone una amenaza nacional estratégica para Estados Unidos
- China califica las acusaciones de ciberespionaje como "irresponsables"
China y Rusia utilizan el ciberespionaje para robar secretos comerciales y tecnológicos de Estados Unidos con el objetivo de impulsar su propio desarrollo económico, lo que representa una amenaza para la prosperidad y seguridad estadounidense.
Estas acusaciones forman parte de un informe de la inteligencia estadounidense titulado Espías extranjeros roban secretos económicos de Estados Unidos en el ciberespacio y que ha sido rápidamente rechazado por el país asiático.
El informe de la Oficina de Contrainteligencia Nacional detalla que en una red informática existe tanta información delicada que los países extranjeros pueden recopilar muchos datos y sin riesgo alguno, porque son muy difíciles de detectar.
Los métodos, obviamente, han cambiado. Hace años, explica un alto funcionario de inteligencia estadounidense, "los espías extraían información mediante carpetas de archivos (físicas), hoy lo hacen con unidades flash".
"Nuestra investigación y desarrollo están siendo atacados", añade la fuente consultada por la agencia Reuters. Servicios de inteligencia, empresas privadas, instituciones académicas y ciudadanos de docenas de países tienen como objetivo a Estados Unidos, aunque el informe solo menciona a China y Rusia.
China rechaza las acusaciones
El portavoz del Ministerio chino de Relaciones Exteriores, Hong Lei, ha rechazado plenamente el informe y ha reiterado que, desde hace mucho tiempo, el país asiático quiere colaborar en estos asuntos.
"Los ataques on-line son anónimos y traspasan fronteras. Identificarlos sin llevar a cabo una investigación exhaustiva y hacer inferencias sobre los atacantes es a la vez poco profesional e irresponsable", asegura Hong.
“Las acusaciones son irresponsables y poco profesionales“
"Espero que la comunidad internacional pueda abandonar los prejuicios y trabajar duro, mano a mano con China, para mantener la seguridad on-line", afirma el portavoz chino.
No obstante, el informe apunta la dificultad de determinar quiénes son los autores de los ciberataques. Empresas estadounidenses han denunciado ataques originados en China, pero las agencias de inteligencia no han podido confirmar quién está detrás de ellos.