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Los escenarios a los que se enfrenta Papandréu ante la moción de confianza

  • No está claro que el primer ministro griego cuente con los apoyos necesarios
  • La opción del gobierno de unidad nacional calma los ánimos y aleja el referéndum
  • Grecia se muestra crítica con la gestión de la crisis de Papandréu

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El primer ministro de Grecia, Yorgos Papandréu, ante el Parlamento griego
El primer ministro de Grecia, Yorgos Papandréu, ante el Parlamento griego

Grecia y su pimer ministro, Yorgos Papandréu, viven este viernes una nueva jornada agónica. Tras las intensas negociaciones y especulaciones vividas el jueves, ha llegado el día en el que el Parlamento griego deberá votar la moción de confianza al Gobierno.

Pese a que el Ejecutivo está, más que nunca, en la cuerda floja, no hay nada decidido y se abren, a falta de horas para la votación, hasta tres opciones posibles en el futuro griego. 

No está claro que Papandréu logre el apoyo necesario para superar la moción, pues algunos de los 151 diputados de su partido podrían votar en contra pese a que tras los acontecimientos del jueves -especialmente que el primer ministro se haya mostrado dispuesto a un Gobierno de coalición y haya dejado en el aire la celebración del referéndum- parecen haber calmado los ánimos en el seno de su partido,  el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK).

Los ojos del mundo entero, representados en la cumbre del G-20, están puestos en este país que ha puesto en jaque en los últimos días la zona euro.

Opción 1: Papandréu gana y se crea un Gobierno de unidad

Si el primer ministro griego logra hacerse con el voto de confianza, podría continuar con su mandato. Pero no es tan sencillo ya que incluso dentro de esta opción, se abren otras posibilidades que pasan por la formación de un gobierno de unidad nacional.

De hecho, esa ha sido la clave que ha tranquilizado a los miembros del partido de Papandréu, aunque la oposición insiste en su dimisión. Por ejemplo, el diputado socialista Mimis Androulakis ha afirmado, en la radio SKAI, que votará a favor de Papandréu solo en el caso de que el primer ministro le "asegure" que iniciará un proceso de formación de un gobierno de unidad nacional.

Entonces, si ganara, a partir de haberse visto reforzado por el voto de confianza, podría iniciar conversaciones con el líder de la oposición, Antonis Samarás (Nueva Democracia, ND), con quien formaría un gobierno de unidad nacional. Pero para ello, el actual primer ministro griego ya ha dejado claro que pretende seguir en el cargo mientras que Samarás busca un gobierno de corte técnico que ponga en marcha junto a él las medidas exigidas por Europa y, después, convocar elecciones anticipadas.

De no lograr un acuerdo Papandréu ya dejó claro el pasado jueves que no descartaba la opción del referéndum, pese a los riesgos que podría implicar -salida del euro y, consecuentemente, de Europa- y a la fuerte presión externa para que no lo lleve a cabo.

Opción 2: Papandréu pierde la moción de confianza

Pese a que los ánimos estén más calmados no hay que descartar que el primer ministro griego no se haga con todos los apoyos necesarios. En ese caso, al haber perdido el respaldo parlamentario, será relevado de sus funciones, que pasarán al presidente de la República, Carolos Papulias, quien recibirá la misión inmediata de formar un nuevo gobierno.

Pese a ello, Papandréu no desaparecería del escenario político ya que Papulias le cedería la labor de formar el Ejecutivo al tratarse del líder del partido más votado en las últimas elecciones, según explica el experto constitucional Yorgos Suterelis a la agencia Efe.

En un plazo de tres días tendría que tener formado el nuevo equipo político pero, de no conseguirlo, sería trabajo del siguiente partido y así sucesivamente.

Con todo, si no se consigue, Papulias se encargaría de formar "un gobierno de servicio" en el que caben todos los partidos y que, más tarde, convocaría elecciones legislativas anticipadas.

Opción 3: Papandréu dimite

El pasado jueves se daba por hecho que el primer ministro griego iba a presentar su dimisión. Diversas fuentes fueron filtrando la intención de Papandréu de dejar el cargo. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Tras la reunión de urgencia con sus ministros dejó claro que no tenía ninguna intención de dejar el Ejecutivo y que, además, "había hecho falta amenazar con un referéndum" para que Samarás estuviera dispuesto a "asumir responsabilidades".

Por ello esta tercera opción se plantea como la más remota si bien es cierto que no es del todo descartable.

"Papandréu ha tomado una decisión a la desesperada. Ha vivido en su país una situación casi de revuelta civil. Ha tenido que dar su palabra a la Unión Europea de que iba a cumplir las medidas sin poder llevarlas ante las instituciones democráticas de Grecia. Vive una situación compleja y es posible que al final dimita y que no se vote ningún referéndum debido a las grandes presiones externas que está recibiendo", explica en RNE el decano de IE Law School, José María de Areilza. 

Que Papandréu dimita podría ser una realidad antes de la votación o incluso después de haberla ganado o perdido. En ese caso su grupo parlamentario tendría que elegir a un nuevo primer ministro con el visto bueno del presidente heleno.

Dora Bakoyanis, exministra de Exteriores del anterior gobierno conservador, diputada y líder de Alianza Democrática (escisión de ND), ha exigido a Papulias que convoque de urgencia un Consejo de los Líderes Políticos que, con representantes de todos los partidos, es un organismo al que sólo se recurre en casos de extrema urgencia.