Rajoy quiere una España en "primera división" y Zapatero rechaza las "dos velocidades" del euro

• El candidato del PP quiere que España esté junto Francia y Alemania
• Zapatero habla con Merkel que le asegura que no habrá división

Mariano Rajoy visita las Canarias

Europa y la crisis de deuda que amenaza al euro entran en campaña de la mano de Rajoy y Zapatero. El presidente del PP y candidato a las elecciones generales, Mariano Rajoy, ha asegurado este jueves que no se plantea cambiar las políticas que propiciaron que España formara parte del euro, sino al contrario: lo que quiere es potenciar esas políticas para estar "en la primera división de Europa".

Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido que Europa mantenga la unión monetaria "a la misma velocidad" y no dividida en dos.

La situación del euro ha irrumpido en el mensaje de Rajoy, quien primero en Santa Cruz de Tenerife y después en Las Palmas, las visitas marcadas esta jornada en su agenda electoral, ha abogado por mantener a España "a la cabeza del euro" junto a "países importantes" como Alemania y Francia.

Rajoy ha destacado que pide el cambio para salir de la crisis, pero ese cambio, según sus palabras, no afectará a la pertenencia a la unión monetaria.

Lo que ha dicho que cambiará, si gobierna a partir del 20N, son las políticas que alejan a España de la vanguardia del euro, y por ello, como posible próximo presidente, su función consistirá en dejar el país "con los primeros" de Europa, donde España, ha dicho, "ha estado siempre hasta que llegaron unos que no han sabido defender los asuntos de una nación".

Sus alusiones a la situación del euro, delicada habida cuenta de la inestabilidad de la deuda de Italia, eran casi obligadas precisamente debido a las noticias que provienen de Roma, en donde el primer ministro, Silvio Berlusconi, podría dimitir en breve.

Pasadas esas alusiones, pero sin salir del todo de la situación económica europea, Rajoy ha recalcado que lo que se decide el 20N no es un partido u otro para gobernar -eso lo ha llamado "literatura de la nada"-, sino, o seguir como hasta la fecha y "caer aún más", o "cambiar de rumbo" y que España "se salve".

Para que triunfe esta segunda opción, el candidato del PP a la Presidencia del Gobierno ha apelado al "esfuerzo de todos" y a la unidad.

Tras reconocer que la misión resultará "muy complicada", ha dicho con solemnidad que "la dificultad es una excusa que la historia no aceptará", y por ello, se ha mostrado convencido de las posibilidades de los españoles para salir de la crisis, sobre todo por el precedente del Gobierno de José María Aznar.

Para Rajoy, está en juego el próximo 20 de noviembre "el corto, el medio y el largo plazo" de España, de ahí que haya insistido en pedir el voto de todos los ciudadanos pertenezcan o no al PP, hayan elegido este partido alguna vez o no.

Tendrá como prioridades, si gobierna, la lucha contra el paro, administraciones austeras, revitalizar la circulación del crédito y formar un Ejecutivo que se caracterice por la verdad, el rigor, la seriedad y por saber explicar las cosas sin engañar nunca.

Zapatero defiende una Europa "a la misma velocidad"

Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido que Europa mantenga la unión monetaria "a la misma velocidad" y no divida en dos, con "un club selecto y otro más perjudicado".

En un mitin en Elche (Alicante) ante unas 1.500 personas para arropar la candidatura al Congreso por la provincia de la ministra de Sanidad, Leire Pajín, Rodríguez Zapatero ha comentado que este mismo jueves mismo ha dialogado con la canciller alemana, Angela Merkel, sobre esta cuestión.

"Me decía (Merkel), para mi tranquilidad, que es una firme defensora del euro y de una unión monetaria y económica en la que todos fuéramos a la misma velocidad, y no a dos, con un club selecto y otro más perjudicado", ha indicado.

El presidente ha apostado por "defender este principio" y se ha felicitado de observar "a una Alemania segura de sí misma proclamando y afirmando la fortaleza de Europa" ante Estados Unidos y los países asiáticos.

Se ha propuesto que, ante terceros países, Europa esté "unida" y se los países se apoyen "juntos para el mantenimiento del estado social".

De la conversación con Merkel, también ha desvelado que la canciller le ha expresado su confianza en España, ante lo cual le ha transmitido su agradecimiento.