El gran debate a cinco, una tertulia amistosa entre Alberto, Ramón, Gaspar, Pere y Josu

• El cuaderno de Gallardón ha sido protagonista en la sombra
• Llamazares ha ido acompañado de su hija, estudiante de periodismo
• Las únicas mujeres que han participado lo han hecho por vídeo
• Los candidatos se han tratado de "tú" y han llegado a llamarse "querido"

El debate ha comenzado media hora después de lo programado. Y no porque haya habido ningún retraso, sino porque a los cinco participantes les ha costado gran parte del primer bloque, dedicado a la economía y el empleo, romper el hielo y empezar a intercambiar opiniones, pese a las reiteradas invitaciones de la presentadora María Casado.

La primera vez ha sido entre los dos vascos de la mesa. Erkoreka creía citar a Rubalcaba cuando decía "el País Vasco es a España, lo que Alemania a la Unión Europea", a lo que Jáuregui ha tenido que interrumpir para certificar que él mismo era el autor de la frase.

Ha sido un debate amable, en el que los cinco participantes han respetado estrictamente los tiempos de intervención, se han tuteado, e incluso han llegado a dirigirse entre ellos como "querido". Lo ha hecho Gallardón con Llamazares, como un "querido Gaspar", que ha sonado a Navidad. Pero el primero en usarlo ha sido Jauregui, y su "querido Alberto" se ha convertido rápidamente en tema del momento en las redes sociales.

El análisis de la situación ha primado sobre las propuestas, tanto, que ha habido tiempo incluso para la "nostalgia". Así se lo ha dicho el representante socialista a Gallardón, tras referirse al periodo en el que gonernaba el PP, "me preocupa tu mirada nostálgica al 96", le ha dicho.

Pere Macias ha dedicado parte de su tiempo de conclusiones al electorado de CiU hablando en catalán, una intervención que la presentadora María Casado ha traducido en tiempo real.

El cuaderno de Gallardón, protagonista

Uno de los protagonistas  en la sombra del debate ha sido el cuaderno de Ruiz Gallardón, del que  se oía al alcalde de Madrid arrancar hojas durante las intervenciones  del resto de participantes.

Hasta diez veces le ha quitado páginas  al cuaderno el número cuatro del PP por Madrid, un sonido que se ha  colado constantemente en los discursos sus compañeros de mesa.

Coches híbridos, familia y asesores de prensa

Al gran debate a cinco de TVE han llegado los representantes de PNV, CiU, IU, PP y PSOE con sus asesores. El ministro de Presidencia y el alcalde de Madrid incluso con guardaespaldas. Este último ha llegado en un coche híbrido, un guiño quizá a las energías renovables, menos agresivo con el cielo de Madrid.

Según ha comentado Manuel Cobo, mano derecha y vicealcalde de Madrid, el alcalde había preparado por las noches el debate con su equipo del Ayuntamiento, y con fichas que le habían mandado desde Génova.

Llamazares, además de a su equipo ha llevado a su hija, estudiante de periodismo, que quería vivir el debate desde dentro.

Todos los equipos han querido conocer los detalles del debate, que ha explicado uno a uno a los participantes la estructura del programa el director de informativos de TVE, Fran Llorente. La inquietud de muchos de los asesoreres era si estarían muy lejos de su candidato al Congreso, y si dispondrían de una televisión para seguir sus intervenciones.

Las únicas mujeres que han participado lo han hecho por vídeo

Una opinión generalizada en las redes sociales ha sido la crítica a la nula participación de mujeres en el debate. Las únicas dos participantes ha sido Rosa Díez de UPyD, y Ana Oramas de Coalición Canaria, que junto con Francisco Jorquera de BNG no han participado en directo por pertenecer al Grupo Mixto, según la decisión de la Junta Electoral.

Después de cada uno de los tres bloques de debate se han podido ver grabaciones de los tres grupos. Rosa Díez ha elegido hacerlo desde la sede de su formación, y ha hecho una condensación de ideas tal, que parecía faltarle aire. Oramas ha hecho una esposición más tranquila de sus ideas, sobre un fondo más aséptico. Jorquera en cambio ha elegido una cortina burdeos.

Pero esos no han sido los únicos vídeos que han protagonizado el debate. Pere Macias i Arau, número dos de CiU por Barcelona ha aprovechado su último minuto de intervención para reprochar a Jáuregui el vídeo sobre la sanidad catalana que ha hecho público el PSC, y del que el ministro no tenía conocimiento. Al principio pensó que se trataba de un argumento contra la Ley de Muerte digna del representante de CiU, y al sumarse Gallardón a las críticas ha zanjado con un "no vamos hablar de lo que no hemos visto".