El Gobierno reconoce que el PIB crecerá un 0,8% y no un 1,3% como estaba previsto
- El gasto total cayó un 0,3% y la inversión bajó un 0,6%
- Las exportaciones crecieron un 3,1% y se perdieron 327.000 empleos
El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, ha reconocido que no se cumplirá la previsión del Gobierno de que la economía española crezca el 1,3% este año y ha destacado que lo más lógico, en un entorno de incertidumbre mundial, es que se registre un crecimiento próximo al 0,8%, según informa Radio Nacional.
En una rueda de prensa, Campa ha opinado así tras conocer que la economía española se estancó en el tercer trimestre debido al ajuste en el gasto público, que cayó el 1,1% respecto al trimestre precedente, así como por una mayor contracción de la inversión en la construcción, del 1,9%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Campa ha incidido en que el crecimiento débil de la economía española está impidiendo la consolidación de la actividad y de la creación de empleo.
De acuerdo con los datos de contabilidad nacional publicados por el INE, el gasto total (incluido el consumo de los hogares) cayó el 0,3% entre julio y septiembre, en tanto que la inversión total se contrajo el 0,6%.
La aportación negativa de la demanda nacional fue contrarrestada por la positiva evolución del sector exterior, lo que fue posible por el crecimiento trimestral del 3,1% de las exportaciones, impulsadas por el avance de la exportación de bienes (5,4%), puesto que las de servicios cayeron el 1,7%.
El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, decreció el 1,9%, ocho décimas más que en el tercer trimestre de 2010, lo que supone una reducción de 327.000 empleos netos. Por ramas, la construcción perdió más de 222.000 empleos, los servicios, 44.000 y la industria, casi 40.000.
Crecimiento interanual del 0,8%
Si se compara el tercer trimestre con el mismo periodo de 2010, la economía española avanzó el 0,8%, entre otras cosas porque en términos interanuales el consumo privado se recupera cuatro décimas, puesto que hace un año cayó significativamente como consecuencia de la subida del IVA en julio.
Este repunte del consumo de los hogares unido a la atenuación de la caída de la inversión permitió que la negativa contribución de la demanda nacional al PIB interanual fuera algo menor (1,2 puntos). No obstante, destaca la peor evolución del gasto final de las administraciones públicas, que en términos interanuales cayó el 2,3%.
Por su parte, el sector exterior también aminoró su aportación positiva al PIB interanual, que pasó de 2,5 a 2 puntos, consecuencia de la desaceleración de las exportaciones, en línea con la ralentización de las economías de destino (fundamentalmente la Unión Europea), así como por el repunte de las importaciones.
Pese a la pérdida de puestos de trabajo, el número de horas efectivamente trabajadas por las personas ocupadas en la economía moderó su caída, al pasar de un decrecimiento del 1,6% al 0,4% en este trimestre.
Según el INE, la diferencia entre la evolución de este número de horas y la de los empleos se debió al aumento del 1,5% de la jornada media a tiempo completo.
La variación interanual de la productividad aparente por puesto de trabajo equivalente se incrementó siete décimas, hasta el 2,7%, mientras que el crecimiento de la productividad aparente por hora efectivamente trabajada pasó del 2,4 al 1,2%.
Mejora la industria
Desde el punto de vista de la oferta destacó la subida de la actividad industrial, el menor descenso de la construcción y la "moderada" desaceleración de los servicios y de las ramas primarias.
Así, el valor añadido bruto de las ramas industriales aumentó siete décimas su crecimiento, hasta el 3,1%, mientras que la industria manufacturera lo incrementó ocho décimas, hasta el 3,8%.
La construcción redujo dos décimas su decrecimiento, al pasar del 3,1 al 2,9%, como consecuencia de la evolución menos desfavorable de la obra de edificación como de las otras construcciones.
Las ramas de servicios bajaron una décima su crecimiento, el 0,8%, y las ramas primarias (agricultura, ganadería y pesca) no registraron actividad alguna frente al crecimiento de dos décima del trimestre anterior.