Desertores atacan un cuartel de la inteligencia militar siria cerca de Damasco
- Es el primer ataque de este tipo desde que comenzó la revuelta
- Ya han muerto 16 personas
- La Liga Árabe se reúne este miércoles en Rabat
Soldados desertores han atacado este miércoles al amanecer una sede de la Inteligencia militar siria en la localidad de Harasta, cerca de Damasco, sin que por el momento se sepa si hay víctimas, según los Comités de Coordinación Local.
Una fuente de esa organización opositora, que ha pedido el anonimato, ha precisado a Efe que los atacantes, que han empleado armas ligeras en el asalto contra una sede secundaria de la Inteligencia Aérea, son miembros del llamado Ejército Libre Sirio.
Este "Ejército" fue creado como fuerza de oposición armada en julio pasado por el coronel Riad al Assad, que desertó y se encuentra refugiado en Turquía. "El Ejército Libre ha lanzado cohetes y granadas contra el cuartel general de la inteligencia aérea", según los Comités. Los prisioneros que se encontraban detenidos en estas instalaciones "se encuentran bien" pero no han podido ser liberados, según las mismas fuentes.
La denominada Brigada Jaled bin Walid de ese grupo de soldados desertores ha reivindicado el ataque en su página de Facebook, sin dar más detalles.
Por su parte, otro portavoz de los Comités, Hozam Ibrahim, ha señalado a Efe que se escucharon varias explosiones dentro de ese edificio. Ibrahim ha destacado que la Inteligencia Aérea fue creada por el padre del actual presidente, Hafez al Asad (1930-2000), que era piloto, aunque con el paso del tiempo se convirtió en un aparato más de los servicios secretos militares.
Según Ibrahim, en la actualidad el cuerpo de la Inteligencia Aérea se considera la institución de seguridad más brutal en su actuación contra las protestas antigubernamentales. A juicio del portavoz, se trataría del primer ataque contra este cuerpo de los servicios de seguridad.
16 muertos en varias localidades
El ataque se produce en un día en el que ya han muerto al menos dieciséis personas en distintas provincias del país, pese a que en esta jornada expira el ultimátum dado por la Liga Árabe al régimen sirio para detener la violencia.
Los Comités de Coordinación Local han precisado siete personas han perdido la vida en la provincia central de Homs, mientras que otras siete han fallecido en Idleb (norte), una en Deraa (sur) y otra cerca de Damasco.
Estas informaciones no han podido ser contrastadas de manera independiente por las limitaciones impuestas por el gobierno sirio a la prensa internacional.
Este miércoles se espera que los ministros de Exteriores de la Liga Árabe se reúnan en Rabat para determinar si entra en vigor la suspensión de la participación Siria en esta organización, decidida el sábado pasado en un encuentro en El Cairo.
Los ministros dieron a Siria de plazo hasta este día para detener la violencia, entre otras medidas, para evitar la entrada en vigor de la suspensión.
El martes, las autoridades anunciaron la liberación de 1.180 personas arrestadas durante la revuelta en cumplimiento de una de las exigencias de la Liga, aunque el régimen de Damasco no ha respondido a otras peticiones como la retirada de las fuerzas de seguridad de las calles.
La represión ha dejado en Siria más de 3.500 muertos desde el comienzo de las revueltas a mediados de marzo pasado, según las últimas cifras de la ONU.