Egipto aprueba una ley que excluye de las elecciones a exmiembros del partido de Mubarak
- No podrán ni votar ni presentarse a las elecciones en 5 años
- Entre otras sanciones, la dimisión de sus cargos públicos
- Era uno de los reclamos desde la caída de Hosni Mubarak
- El decreto se publica a una semana de las elecciones legislativas
La Junta Militar egipcia ha publicado el decreto ley respecto a la corrupción y el perjuicio a la vida política en el país, que podría impedir a exmiembros del partido de Hosni Mubarak concurrir a las próximas elecciones legislativas el 28 de noviembre.
El esperado decreto, difundido por la agencia oficial de noticias egipcia Mena, prohíbe votar o presentarse como candidato a la Asamblea del Pueblo (Congreso) y de la Shura (Senado), así como a los Consejos Municipales, a cualquier persona que "corrompa la vida política y dañe el interés del país".
Esta decisión, exigida por los partidos políticos egipcios, se produce a siete días de las elecciones legislativas, y en medio de violentas protestas en el centro de El Cairo que han dejado en los últimos tres días al menos 33 muertos y más de un millar de heridos.
Los requisitos del decreto
El decreto estipula que la prohibición del derecho de estas personas a votar o presentarse como candidato tendrá una duración máxima de 5 años desde la emisión de la sentencia.
Asimismo, los acusados de corromper la vida política de Egipto o ser cómplices de ello no podrán pertenecer a ningún partido político, también durante como máximo 5 años.
Muchos miembros del disuelto Partido Nacional Democrático (PND) de Mubarak han formado después de la revolución egipcia partidos, mientras que otros se han integrado en diversas formaciones.
Un reclamo constante desde la caída de Mubarak
Desde hace meses los activistas y miembros de partidos políticos denuncian que los remanentes del antiguo régimen volvieran a entrar en el Parlamento, y desde el inicio de la campaña electoral han surgido diversas iniciativas para identificar a los llamados "fulul" (remanentes).
Por otro lado, el decreto de ley publicado este lunes también estipula otras sanciones como la dimisión de estas personas de cargos públicos de liderazgo y la anulación de su participación como miembros en la Asamblea del Pueblo y de la Shura o de los Consejos Municipales.
El pasado 21 de julio, el primer ministro egipcio, Esam Sharaf, ya anunció que había pedido reactivar esta ley, aunque hasta ahora no se había tomado una decisión al respecto.
Además, hace una semana el Tribunal Supremo Administrativo de El Cairo emitió una sentencia que permitía a los miembros del disuelto PND participar en las próximas elecciones legislativas.
El PND fue creado en 1978 por el entonces presidente Anuar al Sadat, su estructura se confundió con la del estado y, entre acusaciones de fraude, arrasó en todas las elecciones parlamentarias celebradas desde su creación, la última en noviembre-diciembre de 2010, en la que se hizo con más de un 80 por ciento de los escaños.
Tras la Revolución del 25 de Enero, el PND fue disuelto y se abrieron procesos judiciales que han llevado a la cárcel a sus principales responsables, desde Mubarak hasta el hijo de este Gamal, "número tres" de la formación, pasando por su secretario general Shafuat al Sherif o el secretario de organización Ahmed Ezz.