El rey belga reúne a los partidos tras la dimisión del pirmer ministro, encargado de formar gobierno
- Estarán presentes los seis partidos que forman parte de las negociaciones
- El rey aún no ha comunicado si acepta la dimisión de su primer ministro
- El punto clave de discusión siguen siendo los presupuestos de 2012
El Rey Alberto II de Bélgica se reunirá este martes a las 11.00 horas con los seis partidos que forman parte de las negociaciones para formar Gobierno, después de que el encargado de liderar estos contactos, el socialista Elio Di Rupo, presentara el lunes su dimisión.
Alberto II mantiene "en suspenso" la decisión sobre si acepta la decisión de Di Rupo, quien había informado previamente al monarca del "bloqueo de las negociaciones presupuestarias, sociales y económicas que debían conducir a la formación de un nuevo Gobierno", según indicó el Palacio de Laeken en un comunicado.
El rey reunirá a los representantes de los seis partidos que integrarán la futura coalición gubernamental en su Castillo Ciergnon, en la provincia de Namur (en el sur del país), donde se recupera de la operación de nariz a la que se sometió el pasado jueves, informa la Agencia Belga.
Seis partidos presentes
Acudirán a la cita la viceprimer ministra socialista Laurette Onkelinx (PS), Bruno Tobback, de los socialistas flamencos (SP.A), Charles Michel, de los liberales francófonos (MR), Alexander De Croo, del partido liberal flamenco (Open VLD), Benoît Lutgen, de los democristianos francófonos (CDH) y Wouter Beke, de los democristianos flamencos (CD&V).
Se espera que las consultas se prolonguen hasta el miércoles para lograr un acuerdo que permita cerrar el presupuesto para 2012.
La cuestión presupuestaria ha hecho naufragar unas negociaciones que, sin embargo, habían logrado superar el difícil escollo que divide a flamencos y francófonos desde hace décadas, la organización del distrito electoral y judicial de Bruselas-Halle-Vilvoorde, BHV, así como la reforma del Estado federal.
Alberto II recordó el lunes a los partidos "la gravedad de la situación" y destacó "que la defensa de los intereses generales de todas las fechas de Bélgica y de Europa requieren una resolución muy rápida de la crisis política".
El próximo presupuesto deberá asumir una gran reducción del déficit público para situarlo en un 2,8 %, tal y como pide la Unión Europea.
El déficit de Bélgica se ha reducido del 5,8 % del PIB que registró en 2009 al 4,1 % en 2010, un resultado mucho mejor que el objetivo del 4,8 % fijado inicialmente.
En su última revisión, el Gobierno belga en funciones rebajó el objetivo para 2011 del 4,1 % al 3,6 %.