Un vídeo muestra que Saif al Islam fue bien tratado por los rebeldes tras su captura

• La Cruza Roja le visita en su centro de detención y comprueba que está bien
• Saif al Islam intenta predisponer a sus captores contra otros líderes rebeldes
• Los combatientes le prometen un juicio justo

Así fue capturado Saif al Islam

Los rebeldes libios han difundido un vídeo con las primeras imágenes de Saif al Islam, el hijo más conocido de Gadafi y su supuesto heredero, grabadas tan solo dos horas después de su captura en el sur del país en un intento de mostrar que está siendo tratado de forma adecuada.

Además, ha permitido al Comité Internacional de la Cruz Roja visitarle en su centro de detención en la localidad libia de Zintan este  martes y la organización ha comprobado que el hijo de Gadafi se encuentra en buen estado de salud.

En la grabación, Saif al Islam aparece con varios dedos vendados pero con buena salud. El vástago del coronel, educado en Londres, luce una tupida barba y ropa tradicional del desierto, y su cara revela cansancio pero no preocupación por su vida.

Los combatientes que le custodian le tratan con respeto y parecen disciplinados, nada que ver con la turba que torturó y ejecutó a Muamar al Gadafi momentos después de dar con él en Sirte.

Advertencias a sus captores

La escena se desarrolla en el salón de una casa. Los guardianes le quitan las esposas a Saif al Islam, que hace gestos de dolor y se mira los dedos.

"¿Estáis filmando?", son las primeras palabras del detenido. "Sí, es nuestro derecho", le responden. Uno de los comandantes rebeldes de Zintan, Al Ajmi Elaeteri, se dirige a la cámara para explicar que el hijo del dictador fue arrestado "de noche, en un lugar llamado Al Ramla entre Obari e Idri".

Después, fuera de plano, añade: "Me atrevo a hablar en nombre de todo el pueblo libio y te garantizamos un juicio justo, seremos limpios, no intentaremos hacerte caer en una encerrona, al contrario, podrás elegir el abogado que quieras. Si se te declara culpable afrontarás el castigo adecuado y si no te liberaremos".

Tras estas promesas, Saif al Islam parece ganar confianza e intenta predisponer a sus captores contra algunos de los líderes revolucionarios. "He andado por el valle por el que subís vosotros ahora y sé lo que hay arriba (...) Seguid pensando que ellos son los buenos y yo soy el mentiroso, pero recordad mis palabras, porque juro ante Dios que he tratado muy bien a esos dos hombres y me han pagado con la traición. Os aseguro que Abdul Hakim Bilhaj (jefe militar de Trípoli) y Ali al Sulabi no os traerán nada bueno".

Crear división entre los rebeldes

El hijo de Gadafi, que en su día profetizó el caos si Libia se levantaba contra el régimen, intenta jugar la carta de la división tribal. "En cuanto a la gente de Bengasi o de la montaña (bereberes), les consideráis vuestros hermanos y los habéis lanzado contra nosotros. Bien, seguid así, pero dadles un par de meses o como mucho un año y veréis la realidad. Pero no neguéis que Saif al Islam os advirtió".

A continuación insiste en dirigir sus dardos contra Belhaj, un exguerrillero islamista que fue secuestrado por Estados Unidos y entregado a las autoridades libias, antes de convertirse en comandante rebelde.

"Cuando los americanos nos lo dieron, nos contó que le habían traido colgado de una barra de hierro, y nos habló de otras torturas a las que le habían sometido. Siempre nos hemos portado bien con él, le pusimos en una casa, trajimos a su mujer y a sus hijos. Solo le retuvimos en una casa durante algún tiempo", dice el hijo de Muamar al Gadafi.

Los últimos planos del vídeo muestran el traslado del detenido a la ciudad de Zintan, en el oeste de Libia, desde donde presumiblemente será trasladado a Trípoli.

Además de responder de los crímenes por la represión en Libia, Saif al Islam tiene pendiente una causa en la Corte Penal Internacional (CPI) por el mismo motivo.