Pakistán cierra a la OTAN la ruta hacia Afganistán y exige desalojar una base
- La OTAN utiliza esos pasos fronterizos para transportar suministros
- Pakistán da 15 días a EE.UU. para desalojar la base aérea de Shamzi
El Gobierno de Pakistán ha decidido este sábado cerrar sus pasos fronterizos con Afganistán a los vehículos que transportan suministros para las fuerzas de la OTAN y ha exigido a la alianza que desaloje en un plazo de 15 días una base en su territorio desde la que operan aviones espía.
La decisión ha sido adoptada en una reunión del comité gubernamental de Defensa, celebrada de manera extraordinaria tras un ataque horas antes de helicópteros del a OTAN que causó la muerte de 25 soldados paquistaníes en la región tribal de Mohmand, que limita con Afganistán.
En el encuentro, al que ha asistido la cúpula de las Fuerzas Armadas, el Gobierno ha instado a "revisar todos los programas, actividades y acuerdos de cooperación con EE.UU. y la OTAN", según un comunicado difundido por el Ministerio de Asuntos Exteriores.
"Los ataques constituyen una violación de la soberanía, de la ley internacional y de la base fundamental de la cooperación de Pakistán con la OTAN contra el terrorismo", agrega la nota, antes de agregar que el primer ministro, Yusuf Razá Guilani, comparecerá "en un futuro cercano" ante el Parlamento nacional.
De acuerdo con la nota, el Gobierno paquistaní ha decidido, asimismo, "cerrar con efecto inmediato las rutas de suministro logístico" de la Alianza Atlántica a través de sus pasos fronterizos de Khyber y Chamán.
Pese a que en los últimos años las fuerzas internacionales, en especial EE.UU., han transportado cada vez más suministros por otras vías en Asia Central, las rutas paquistaníes continúan siendo esenciales para abastecer a las tropas destacadas en el país vecino.
15 días de plazo
El Ejecutivo paquistaní ha anunciado, igualmente, que pedirá a EE.UU. que "desaloje en un plazo de 15 días la base aérea de Shamzi", situada en la provincia suroccidental de Baluchistán.
Desde allí, supuestamente despegan algunos de los aviones no tripulados estadounidenses que atacan con frecuencia objetivos de los grupos radicales islámicos Taliban y otros insurgentes en las conflictivas áreas tribales paquistaníes.
Pakistán acusa con relativa frecuencia tanto a las fuerzas afganas como internacionales de atacar sus posiciones en la frontera, de unos 2.600 kilómetros, pero el número de fallecidos en el ataque de anoche no tiene precedentes.
La relación entre EE.UU. y Pakistán ha empeorado notablemente en los últimos meses, sobre todo a raíz de la muerte de Osama Bin Laden el pasado mayo en una operación unilateral de un comando estadounidense en el norte del país surasiático.