EE.UU. investigará el ataque aéreo pero Pakistán dice que reducirá su cooperación con la OTAN
- La OTAN admite que su fuerza aérea pudo matar a los 25 soldados
- La ministra paquistaní de Exteriores confirma a Clinton el bloqueo
- Clinton dice estar "muy triste por el suceso" y pide resolverlo juntos
- Pakistán también pide explicaciones a Afganistán por el ataque
- Miles de ciudadanos protestan frente al consulado de EE.UU. en Karachi
El Gobierno de Estados Unidos está dispuesto a cooperar con el de Pakistán en la investigación del ataque aéreo de la OTAN que dejó al menos 25 soldados pakistaníes muertos, han indicado funcionarios de la Casa Blanca, un anuncio que no han impedido que miles de paquistaníes hayan protestado frente al consulado norteamericano en la ciudad de Karachi.
Un reportero de Reuters en el lugar ha señalado que la multitud enfurecida gritaba "¡Abajo Estados Unidos", mientras un joven se subía a la muralla que rodea el complejo fuertemente fortificado con una bandera paquistaní.
Los informantes norteamericanos, no identificados, han añadido que funcionarios civiles y militares de alto rango en el Gobierno de Estados Unidos han expresado sus condolencias a Pakistán por el incidente.
También indicaron la disposición del gobierno de Barack Obama a cooperar con Pakistán en la investigación del incidente en la zona fronteriza con Afganistán.
Las relaciones se deterioran
Las complejas relaciones entre Estados Unidos y Pakistán se deterioraron gravemente después que una unidad de fuerzas especiales estadounidenses mató, en mayo, al jefe de Al Qaeda, Osama bin Laden, en su residencia en territorio pakistaní.
En meses recientes se intensificó la presión de Washington para que el gobierno pakistaní actúe contra los grupos insurgentes que operan en Afganistán y encuentran refugio tras la frontera de Pakistán.
Pakistán, a su vez, ha protestado de manera cada vez más enérgica por los ataques con aviones sin tripulación operados por Estados Unidos y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte desde Afganistán.
Ayuda militar y civil
En los últimos diez años, Estados Unidos ha dado a Pakistán unos 20.000 millones de dólares en ayuda militar y civil, lo cual convierte a ese país del sur asiático en el tercer mayor receptor de asistencia de seguridad después de Afganistán e Israel.
Pero en Pakistán predomina un sentimiento anti Estados Unidos espoleado por los ataques de aviones sin tripulación contra reductos de insurgentes, que han causado la muerte de centenares de civiles.
En el congreso de Estados Unidos, algunos legisladores han propuesto la suspensión de la ayuda financiera a Pakistán por la sospecha de que su gobierno o sus servicios de inteligencia militar cooperan con los talibanes en Afganistán.
En julio, el gobierno de EE.UU. anunció que retendría unos 800 millones de dólares de la ayuda militar asignada a Pakistán después que el gobierno de Islamabad expulsó a unos 130 instructores militares estadounidenses y añadió límites a las visas del personal estadounidense en ese país.
En septiembre, el nuevo jefe del Pentágono, Leon Panetta, advirtió de que Estados Unidos haría todo lo posible para defender a las fuerzas estadounidenses en Afganistán contra los insurgentes que operan desde Pakistán.
Disminuye su cooperación con la OTAN
La ministra paquistaní de Exteriores, Hina Rabbani Khar, ha comunicado este domingo a su homóloga de EE.UU., Hillary Clinton, la decisión de su Gobierno de disminuir la cooperación con la OTAN tras el ataque que ayer mató a 25 soldados de Pakistán.
En una conversación telefónica, Khar ha dicho a Clinton que "este tipo de ataques son totalmente inaceptables" y "cercenan el progreso hecho por los dos países en mejorar las relaciones", según reza un comunicado oficial.
Khar confirmó a la secretaria de Estado estadounidense las decisiones tomadas anoche por su Ejecutivo de bloquear a los vehículos de la OTAN los pasos fronterizos hacia Afganistán, de desalojar a EE.UU. de una base aérea en el suroeste del país y de revisar los parámetros de cooperación con la Alianza Atlántica.
Estas medidas se tomaron a última hora del sábado en una reunión extraordinaria del comité gubernamental de Defensa a la que asistió la plana mayor de las Fuerzas Armadas paquistaníes.
Clinton, por su parte, ha asegurado estar "muy triste por el suceso" y trasladó a la titular de Exteriores paquistaní "el deseo del Gobierno de EE.UU. de trabajar con Pakistán para resolver el asunto".
Pakistán acusa con frecuencia tanto a las fuerzas afganas como internacionales de atacar sus posiciones en la frontera con Afganistán, de unos 2.600 kilómetros, pero el número de fallecidos en el ataque de anoche en la región tribal de Mohmand no tiene precedentes.
Explicaciones a Afganistán
El Gobierno paquistaní también ha pedido explicaciones a Afganistán por el ataque. "El Gobierno de Afganistán tiene que asegurarse de que actos así no se llevan a cabo desde su territorio contra Pakistán", ha exigido la cancillería en un comunicado.
Islamabad también recordó que "el uso del territorio afgano contra Pakistán por parte de la OTAN es una violación" del mandato de esta misión militar (conocida como ISAF), que se circunscribe al suelo afgano. Bruselas y Washington han pedido perdín y han abierto una investigación.