Exteriores recomienda a los españoles que abandonen Siria "de forma inmediata"
- Antes de que las aerolíneas dejen de tener vuelos regulares
- La página del Ministerio "desaconseja" viajar al país
- Pide a los turistas que no se desplacen fuera del centro de Damasco
El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación recomienda abandonar Siria "de forma inmediata" a todos aquellos españoles que se encuentren en el país y antes de que las aerolíneas comerciales dejen de prestar sus servicios con regularidad.
El departamento que dirige Trinidad Jiménez ha actualizado sus recomendaciones de viaje para Siria y "desaconseja" cualquier desplazamiento a este país, debido al tinte que ha adquirido la revuelta contra el régimen de Bashar al Asad.
Advierte además de que diversas compañías han cancelado sus vuelos a Siria en las últimas semanas y aquellas que los mantienen han reducido la frecuencia de los mismos. Por eso aconseja salir del país ahora, antes de que sea más difícil encontrar plaza en un vuelo comercial.
Alerta asimismo de que los diplomáticos españoles y europeos podrían tener dificultades para asistir a algún nacional que precise ayuda fuera de Damasco debido al "deterioro de la seguridad de las comunicaciones interiores en Siria así como las limitaciones que las autoridades sirias están imponiendo a la libertad de movimiento de los diplomáticos extranjeros dentro del país".
Exteriores reitera la necesidad de evitar la zona sur del país (especialmente la ciudad de Deraa), la costa (provincias de Latakia y Tartus), las provincias de Homs e Idleb, las ciudades de Hama, Deir Ezzor y Abu Kamal, así como los barrios periféricos de Damasco.
A aquellos españoles que permanezcan en Siria y que aún no hubieran comunicado sus direcciones y números de contacto a la sección consular de la Embajada, les recuerda la necesidad de hacerlo tan pronto como sea posible y de comunicar cualquier cambio que se hubiera producido en los datos facilitados con anterioridad a la legación.
El número de españoles residentes en Siria ascendía en 2010 a 1.078 personas, mientras que el de no residentes se limitaba a 158, según datos de Exteriores.