El TS sube de 2 a 9 años la pena a un hombre que contagió "conscientemente" el VIH
- La Audiencia de Madrid le habia condenado también a una indemnización
- La sentencia argumenta que no avisó para mantener sexo sin protección
- El condenado llevaba años de tratamiento para combatir elVIH
El Tribunal Supremo (TS) ha elevado de dos a nueve años la pena de prisión para un hombre que contagió el VIH a su pareja, a la que "conscientemente", y para poder "seguir manteniendo" relaciones sexuales con ella, algunas sin protección, no informó de que era portador de esta enfermedad.
Así, en una sentencia en la que admite el recurso de casación de la afectada contra el fallo de la Audiencia Provincial de Madrid que le condenaba a dos años de prisión, a pagar una indemnización de 90.000 euros y a no aproximarse a menos de 500 metros de ella, el Alto Tribunal considera al condenado autor de un delito doloso de lesiones graves con la agravante de parentesco.
Según la sentencia recurrida, el hombre, "siendo portador del virus VIH desde hacía muchos años" y por cuya enfermedad seguía tratamiento desde mayo de 1997, "inició una relación sentimental" con la víctima, a la que en "ningún momento" le contó esta circunstancia.
Así, incluso después de no haber utilizado el preservativo hasta en dos ocasiones, no se lo dijo hasta el último mes de relación, "aunque refiriéndola que acababa de enterarse del contagio" y "sugeriéndola que se realizara ella también" las pruebas.
Finalmente, aunque en una primera prueba dio negativo, tres meses después se confirmó que era portadora del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Para el Supremo, al contrario de que la Audiencia Provincial de Madrid, que apreció imprudencia grave, en este caso existe una conducta dolosa del acusado, ya que "tenía pleno conocimiento de la posibilidad de que se produjera el resultado de graves lesiones y el alto grado de probabilidad" de ocasionarlas, "máxime cuando en dos ocasiones ni siquiera utilizó preservativos".
Según los magistrados, la existencia o no de esa previa información "resulta crucial", ya que la afectada "había aceptado mantener unas relaciones sexuales que no lo habría hecho de conocer que las estaba realizando" con un enfermo de sida.
No obstante, "conscientemente, y para seguir manteniendo esas relaciones, omitió informar a su víctima de que era portador de una enfermedad que se contagia con ese tipo de relaciones, como así sucedió", concluyen.