La UE destinará 200.000 millones de euros al FMI para incrementar sus recursos
- Acuerdan acelerar la entrada en vigor del mecanismo permanente de rescate
- Apoyan la cintroducción de la regla de oro en las constituciones
La Unión Europea destinará 200.000 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI) para incrementar sus recursos y que pueda socorrer a estados miembros en apuros, según ha anunciado el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
"Los países del euro y otros Estados miembros pondrán a disposición del FMI hasta 200.000 millones de euros para incrementar nuestros recursos financieros y hacer frente a la crisis", ha señalado Van Rompuy en rueda de prensa al término del encuentro que comenzó en la tarde de este jueves.
La medida forma parte de un paquete a corto plazo que también incluye la puesta en marcha rápida de la ampliación del fondo temporal de rescate (FEEF) y el adelanto de la entrada en vigor del fondo permanente (MEDE) a julio de 2012.
Los líderes europeos han acordado también introducir un cambio en el planteamiento sobre la participación privada en los rescates para dejar claro que la condonación del 50% de la deuda acordada en el caso de Grecia fue una excepción.
"De ahora en adelante, nos adheriremos estrictamente a los principios y prácticas del FMI", ha asegurado y lamenta el efecto que la participación del sector privado ha tenido en los mercados en el caso de Grecia. Según Van Rompuy, esta posibilidad "se ha terminado oficialmente".
"A corto plazo hemos acordado ciertas acciones inmediatas para superar las dificultades actuales y a largo plazo hemos acordado un pacto fiscal para la zona euro", resumió Van Rompuy.
La cena informal de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, que duró más de diez horas, ha concluido a las cinco de la madrugada (04:00 GMT) de este viernes sin lograr que el refuerzo de la disciplina presupuestaria quedase reflejado en un tratado que implicara a los 27 miembros de la UE.
Ante la oposición del Reino Unido y de Hungría, 23 estados miembros anunciaron su disposición de unirse a un tratado intergubernamental, mientras que otros dos (Suecia y República Checa) pidieron consultar con sus parlamentos o los otros socios de sus coaliciones de Gobierno.
Equilibrio presupuestario en las constituciones
Los líderes apoyan introducir la regla de oro sobre equilibrio presupuestario en las constituciones y crear un mecanismo de corrección automática para casos de desviación. El Tribunal de Justicia de la UE tendría competencia para verificar la transposición de esta regla a la legislación nacional.
Los presupuestos nacionales deberán ser en principio equilibrados y los países sólo podrán incurrir en déficit en circunstancias económicas excepcionales o para reflejar el impacto del ciclo económico en el presupuesto.
Los Estados miembros tendrán cierto margen, de manera que se considerará que respetan la regla aquellos que no se desvíen más de un 0,5 % del PIB nominal y también podrán tener déficit estructurales más elevados aquellos que tengan un nivel de deuda significativamente inferior al 60 % del PIB.
Los países que estén bajo programas por déficit excesivo enviarán a la CE y al Consejo un programa con las reformas estructurales necesarias para asegurar una corrección duradera del déficit excesivo.
La aplicación del programa y los presupuestos anuales serán supervisados por la Comisión y el Consejo y además se pondrá en marcha un mecanismo de notificación ante de sus planes de emisión de deuda.
El procedimiento por déficit excesivo será también reforzado de manera que haya sanciones más automáticas para los incumplidores que serán adoptadas, a propuesta de la CE, a menos que una mayoría cualificada de países se oponga.
Sin acuerdo sobre los eurobonos
Los líderes europeos no han logrado cerrar un acuerdo entorno a la emisión común de deuda, los llamados eurobonos, ante la oposición principalmente de Alemania, aunque sí han acordado seguir estudiando la cuestión y elaborar un informe al respecto en junio.
"No hemos logrado un acuerdo esta noche en este asunto (los eurobonos)", ha señalado en rueda de prensa el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al termino de la cena informal que han mantenido los jefes de Estado y de Gobierno desde este jueves por la tarde y durante toda la noche.
Los países del euro sí estuvieron de acuerdo en dar un mandato a los presidentes del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker; de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y al propio Van Rompuy, según ha informado este último. La idea es que los tres sigan trabajando sobre la cuestión y elaboren un informe al respecto que será presentado en junio del año que viene a los líderes comunitarios.
Los eurobonos es una de las fórmulas que los analistas y algunos socios del euro consideran que forman parte de la solución a la crisis, ya que contribuirían a restaurar la confianza de los mercados y pondrían en pie de igualdad a todos los socios de la moneda única.
Esta reunión ha visto cómo la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro holandés, Mark Rutte, mantenían su oposición a los eurobonos, a pesar de un apoyo muy importante en la cumbre de la Unión Europea, que incluyó también a la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagardes según explicaron fuentes diplomáticas.
Van Rompuy había propuesto en un borrador de acuerdo inicial que la emisión común de deuda fuese considerada como una posibilidad a largo plazo que sólo podría producirse una vez completado el refuerzo de la disciplina fiscal.