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India y China frenan un acuerdo contra el cambio climático y algunas delegaciones dejan Durban

  • Los retrasos obligan a muchos delegados a irse para no perder sus vuelos
  • Pero las negociaciones continúan esta madrugada en una sesión plenaria
  • China e India se oponen al plan de la UE para conseguir un acuerdo global

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La Cumbre del Clima de Durban sigue sin un acuerdo

La Cumbre de la ONU sobre Cambio Climático ha entrado en su recta final en medio del caos y la crispación por los retrasos que han obligado a muchos delegados a regresar a casa sin un acuerdo, para no perder sus aviones. Sin embargo, las negociaciones continúan en la madrugada de este domingo en una sesión plenaria en la que China e India se han opuesto al plan de la UE para conseguir un acuerdo global contra el calentamiento climático. 

La reunión, que tendría que haberse clausurado el viernes por la noche, se extendió durante todo este sábado y amenaza con prolongarse varias horas más.

Algunos ministros han abandonado ya el centro de Convenciones de Durban y un responsable de la ONU ha anunciado este sábado por la noche que la compañía sudafricana, South African Airways, pondría mañana a disposición de los delegados un avión más grande para trasladarlos a Johannesburgo, donde deben conectar con sus vuelos de regreso.

La presidenta de la cumbre, la ministra sudafricana Maite Nkoana-Mashabane, ha sido el blanco de todas las críticas por el retraso sufrido en la conferencia, ya que no presentó ningún texto para las negociaciones hasta el viernes por la noche. "Se ha puesto las pilas a última hora", declaró una negociadora europea.

La conferencia, que comenzó el pasado 28 noviembre, debía haber finalizado el viernes por la noche y el retraso evocó el precedente de la conferencia sobre el clima celebrada en La Haya en 2000 que no pudo alcanzar un consenso a tiempo y fue suspendida y retomada en Bonn unos meses después.

La secretaria de Estado española de Cambio Climático en funciones, Teresa Ribera, fue una de las responsables políticas que se vio obligada a dejar la cumbre.

Ribera calificó de "preocupante" el que la presidencia sudafricana dilatara hasta el viernes el acceso a los textos de la negociación, lo que dificultó las conversaciones en momentos como anoche, cuando se vislumbraba una gran "oportunidad" de alcanzar un acuerdo.

Oposición de China e India

Pero las tormentosas negociaciones prosiguen en Durban en una sesión plenaria en la que delegados de los 195 países debatían una propuesta de acuerdo negociada por un reducido grupo de ministros durante gran parte de la jornada.

Las dos principales potencias de Asia, China e India, se han opuesto a la propuesta impulsada por la UE de crear un acuerdo global en la lucha contra el calentamiento.

La India que desde el comienzo de las negociaciones se ha mostrado reacia a asumir compromisos vinculantes de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ha asegurado que no está en condiciones de asumir obligaciones que puedan limitar su desarrollo.

La postura de India fue también secundada por China, lo que supuso un duro golpe para las negociaciones en la cumbre de Durban, que afronta el desafío de renovar un segundo protocolo de Kioto, supeditado un nuevo marco internacional que incluya a los principales emisores.

El borrador del acuerdo prevé la negociación de un marco legal o Protocolo que sería adoptado en 2015 y que incluiría a todos los países y no sólo a los industrializados, como es el caso del Protocolo de Kioto, que obliga sólo a las naciones industrializadas, exceptuando a Estados Unidos.

Sin embargo, deja abierta la fecha de su entrada en vigor.Ese acuerdo era la condición impuesta por la Unión Europea para sumarse a un segundo periodo del Protocolo de Kioto una vez que expire en 2012.

Deficiencias del borrador

El borrador fue recibido con decepción por algunos países en desarrollo porque no menciona el importante tema de la responsabilidad diferenciada a la hora de recortar emisiones, dependiendo del grado de desarrollo de los países.

La representante venezolana, Claudia Salerno, protagonista de otras sonadas intervenciones en cumbres pasadas, acusó a la UE de apoyar un segundo periodo de compromiso del Protocolo de Kioto "vacío de compromisos" por el bajo nivel de ambición a la hora de combatir el cambio climático.

"No es sólo un mal texto, sino que tiene serias deficiencias", declaró Salerno quien afirmó haber sido amenazada con que su país no recibiría dinero del Fondo Verde para el Clima de la ONU si no apoyaba la propuesta.

Ese fondo, por el que los países desarrollados se han comprometido a dar 100.000 millones de dólares anuales (unos 74.000 millones de euros) a los países en desarrollo a partir de 2020 para combatir el cambio climático, también forma parte de la negociación llevada a cabo este sábado.