Las dos cajas rurales más importantes de España, Cajamar y Ruralcaja, aprueban su fusión
- 'Cajas Rurales Unidas' será el nombre de la nueva entidad
- Aglutina la mitad del negocio de las cajas rurales en nuestro país
- Entre las dos sumarán más de 38.000 millones de euros en activos
Los consejos rectores de la almeriense Cajamar y la valenciana Ruralcaja, las dos primeras cajas rurales de España, han aprobado este jueves su proyecto de fusión, del que resultará una nueva entidad, 'Cajas Rurales Unidas', que contará con más de 38.000 millones de euros en activos, casi un millón de socios y 3,3 millones de clientes.
La operación, comunicada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), será sometida a sus respectivas asambleas generales el próximo 17 de enero. En un comunicado, ambas entidades han coincidido en la necesidad de "dar un impulso al proceso de concentración del sector de cajas rurales", que contribuya a "reforzar su solvencia" y a "mejorar su eficiencia y competitividad" en el sistema financiero español.
Asimismo, han trasladado una invitación a las demás cajas rurales españolas para que se sumen a un nuevo grupo nacional "unido y cohesionado, capaz de dar respuesta a los retos derivados de la situación económica actual", y que mantiene "especialmente" su compromiso con el sector agroalimentario y el mundo rural.
La nueva entidad, con la denominación social Caja Rurales Unidas, Sociedad Cooperativa de Crédito, resulta de la unión de los SIP (Sistema Institucional de Protección) Grupo Cooperativo Cajamar y Grupo CRM -encabezado por Ruralcaja-. Entre las fusiones previas y las integraciones mediante un SIP, la entidad final aglutinará a un total de 27 cajas.
Unión de casi la mitad de las cajas rurales
La entidad resultante nace con 63.559 millones de euros de volumen de negocio, un coeficiente de solvencia del 12,33%; 968.851 socios; 3,3 millones de clientes; 6.352 empleados y un total de 1.465 oficinas. Estas cifras representan el 44,6% del negocio total del sector de las cajas rurales españolas, el 43% de los activos, una de cada tres oficinas y un tercio de los empleados.
En los últimos cuatro años, Cajamar se ha fusionado con Caja Rural del Duero, Caixa Rural Balears y Caja Campo, además de promover la constitución del Grupo Cooperativo Cajamar, el primer SIP autorizado por el Banco de España, al que se han sumado Caja Rural de Casinos, Caixa Albalat, Caixapetrer, Caixa Turís y Caja Rural Castellón, y al que se espera que se incorpore también Caja Rural de Canarias, han recordado fuentes de Cajamar.
Por su parte, Ruralcaja, fruto de la fusión de las cajas rurales de Alicante, Elche, Valencia, y Credicoop de Castellón, ha liderado la creación del Grupo CRM, en el que se integran otras catorce cajas rurales valencianas: Caixa Rural Torrent, Crèdit Valencia, Caixaltea, CR Burriana, Caixacallosa, Caixa Rural Nules, Caixalqueries, Caja Rural de Cheste, Caixa Rural D'Alginet, Caja Rural de Villar, Caixa Rural Vilavella, Caixa Rural Almenara, Caixa Rural Xilxes y Caixa Rural Vilafamés.
Organigrama de la entidad
'Cajas Rurales Unidas' tendrá su sede en Almería y estará presidida por el actual vicepresidente y consejero delegado de Cajamar, Juan de la Cruz, mientras que su copresidente será Eduardo Ferrer Perales, presidente de la valenciana. La nueva entidad, que tendrá un consejo rector de 20 miembros, 14 a propuesta de Cajamar y seis de Ruralcaja, contará con una subsede operativa e institucional en Valencia.
Asimismo, el director general de Cajamar, Manuel Yebra Sola, pasará a ser el vicepresidente primero ejecutivo de la nueva entidad, y el director general de Ruralcaja, Juan Antonio Gisbert García, será consejero delegado. Los vicepresidentes y el secretario del Grupo CRM se incorporarán al consejo rector de la nueva entidad, así como Luis Robledo Grau, anterior presidente de Caja Campo, entidad que este también se ha fusionado con Cajamar.
El actual presidente de Cajamar, Antonio Pérez Lao, y el copresidente, Luis de la Maza Garrido, junto a otros consejeros cuyo mandato se cumplía el próximo mes de marzo, y que ya habían anunciado su propósito de no presentarse a la reelección, dejarán sus puestos para favorecer el relevo generacional en los órganos de gobierno de la nueva entidad.