El nuevo Rainbow Warrior llega a España para celebrar el 40 aniversario de Greenpeace
- El buque insignia de Greenpeace es ahora más ecológico
- Ha sido presentado en el puerto de Barcelona
- La organización ecologista celebra 40 años defendiendo el medio ambiente
Greenpeace celebra su 40 aniversario y lo hace presumiendo de tener el barco más "verde del mundo" durante la presentación de su nuevo buque insignia, el Rainbow Warrior III: el velero más ecológico de la organización, capaz de navegar impulsado sólo por la fuerza del viento, evitando emisiones de CO2.
Los ecologistas han presentado hoy en el Puerto Marítimo de Barcelona el nuevo "Guerrero del Arco Iris", un velero diseñado con tecnología sostenible que incorpora dos mástiles de 50 metros de altura en forma de A para sostener cinco velas artesanales y ecológicas construidas en Cuntis (Pontevedra).
Las velas desplegadas alcanzan unos 1.300 metros cuadrados de superficie, pudiendo ahorrar alrededor de cuatro toneladas de combustible al día.
“Sus velas desplegadas permiten ahorrar cuatro toneladas de combustible al día“
El nuevo velero de 57,92 metros de eslora y de 11,30 metros de ancho, fue diseñado por un armador holandés especializado en veleros y, aunque el trabajo en el casco se inició en el astillero polaco de Gdansk en el verano de 2010, finalmente terminó de construirse en el astillero de Fassmer (Alemania).
Según los responsables de la organización ecologista, los 22 millones de euros necesarios para su financiación han llegado de mano de los socios y de donantes anónimos.
El barco, cuenta con un sistema para el lubricante y el combustible que previene los vertidos, tratamiento biológico de las aguas grises y negras y pintura libre de tóxicos y sólo usa maderas certificadas FSC.
El calor que genera un pequeño motor con propulsión diesel-eléctrica para tareas de amarraje o durante fuertes temporales es utilizado para calentar el agua necesaria para una tripulación compuesta por 14 miembros, que pueden llegar a ser 32 durante los periodos de campaña.
El Rainbow llegó ayer a Barcelona después de un corto periplo por puertos europeos, antes de partir la semana que viene hacia su nuevo destino, Estados Unidos, donde se llevarán a cabo diversas campañas para denunciar el uso del carbón.
Durante el acto, Greenpeace ha hecho un balance de estos últimos 40 años en defensa del medio ambiente, tiempo transcurrido desde que un grupo de jóvenes activistas canadienses fletaran un viejo pesquero para detener las pruebas nucleares que Estados Unidos realizaba en Alaska.