Estado de calamidad por las inundaciones en Filipinas, que dejan casi un millar de muertos
- El presidente Benigno Aquino ha visitado las zonas más dañadas
- Hay 563 desaparecidos, según la Cruz Roja
- Más de 338.000 personas se han visto afectadas
El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, ha declarado este martes el estado de calamidad nacional a causa de las inundaciones y los deslizamientos de tierras causados la semana pasada por el paso del tifón 'Washi' en el sur del país, que han dejado ya casi un millar de muertos y han dejado sin vivienda a decenas de miles de personas.
El portavoz de Aquino, Ricky Carandang, ha precisado que la declaración de la calamidad nacional permitirá al Gobierno acceder a una mayor cantidad de fondos de ayuda y rehabilitación.
El último balance de la agencia nacional de desastres es de 957 muertos y 563 desaparecidos. La mayoría de las víctimas se ha registrado en las ciudades de Cagayan de Oro e Iligan, en la región de Mindanao.
El presidente Aquino se ha reunido con las autoridades de estas dos ciudades, las más afectadas por las inundaciones y por los deslizamientos de tierras procedentes de las montañas, que arrasaron el pasado sábado las aldeas situadas a orillas de los ríos y del mar en el momento en que sus habitantes dormían.
Objetivos inmediatos
"La máxima prioridad es reubicarlos en las zonas que ya no supongan un peligro para ellos", ha declarado Aquino durante un encuentro con las autoridades de Cagayan de Oro, ante los cuales prometió tomar las medidas necesarias para evitar otra tragedia de estas magnitudes.
El recuento oficial de víctimas mortales se ha disparado en las últimas horas tras la localización de decenas de cadáveres arrastrados por las riadas por los equipos de rescate.Las autoridades de Iligan han anunciado que este martes enterrarán a 300 cadáveres en una fosa común.
El número de damnificados ha subido a 338.415 personas, de las que 42.733 se encuentran en 62 centros de acogida, de acuerdo con las informaciones del Consejo Nacional de Prevención y Respuesta a Desastres. El director de esta agencia, Benito Ramos, ha señalado que los afectados necesitan urgentemente agua potable y que luego necesitarán asistencia para reconstruir sus vidas.
Aldeas enteras y cientos de viviendas han quedado anegadas por las riadas desencadenadas por las copiosas precipitaciones que la tormenta tropical "Washi" ha descargado en la región desde el viernes.
La prensa local y parte de la población culpa de la catástrofe al Gobierno por no haber avisado antes de la tormenta tropical, mientras que las autoridades alegan que los vecinos no se prepararon en plena época de lluvias.Entre la tarde del viernes y la madrugada del sábado, "Washi" descargó en Mindanao más cantidad de agua que toda la recogida en la región durante un mes de la estación lluviosa.
Los expertos de las agencias internacionales identifican el chabolismo como el principal factor del gran número de muertos que causan en el país los desastres naturales y que evidencian el mal estado de las infraestructuras. La incontrolada deforestación propicia las riadas y avalanchas de tierra que son frecuentes durante la estación lluviosa que por lo general comienza en mayo y concluye en noviembre.