El presidente iraquí acoge a Al Hashemi hasta que se le garantice proceso justo

• Pide un juicio "lejos de injerencias, presiones y dudas"
• Talabani trabaja "con todos sus contactos" para conseguir estas garantías

El presidente iraquí, Yalal Talabani, ha comunicado este sábado que ha acogido al vicepresidente suní, Tareq al Hashemi, sobre el que pesa una orden de detención, y que este se presentará ante la Justicia cuando se le garantice un proceso justo.

Según un comunicado de la presidencia de Irak, Talabani está actuando "a través de todos sus contactos" para conseguir dichas garantías y expresa su confianza en la capacidad de la Justicia para solucionar el asunto "lejos de injerencias, presiones y dudas".

Crisis iraquí

Al Hashemi "se presentará ante la Justicia bajo la condición de que en el momento de hacerlo se le garantice una investigación y un proceso justos", apunta la nota.

El pasado día 19, las autoridades judiciales emitieron una orden de arresto contra Al Hashemi, supuestamente vinculado con delitos de terrorismo.

Días más tarde, el vicepresidente suní defendió su inocencia desde el Kurdistán iraquí y se mostró dispuesto a comparecer ante la Justicia, a lo que el primer ministro, Nuri al Maliki, respondió con una petición a las autoridades kurdo-iraquíes para que entregasen a Al Hashemi.

Tras la orden de la detención, el bloque político de Al Hashemi y del ex primer ministro Ayad Alaui, Al Iraqiya, decidió boicotear las reuniones del Gobierno de unidad nacional, donde tiene ocho ministros, después de haberse retirado previamente del Parlamento.

El viernes, varios líderes políticos y religiosos iraquíes, entre ellos el máximo clérigo chií del país, ayatolá Ali al Sistani, advirtieron del deterioro de la situación política y de seguridad que sufre este país.

La crisis política en Irak se desarrolla en un momento de gran incertidumbre sobre la situación de la seguridad en el país, después de que el pasado domingo los últimos soldados estadounidenses se retiraran del territorio iraquí, lo que puso fin a casi nueve años de su presencia.