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El rey fija la lucha contra el paro como objetivo y pide el esfuerzo de todos para salir de la crisis

  • No menciona el caso Urdangarin pero dice que “la justicia es igual para todos”
  • "El camino de la recuperación no será corto ni fácil y exigirá sacrificios"
  • Subraya la vocación europeísta de España y el compromiso del país con la UE

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Discurso íntegro del rey 2011

El rey ha hecho balance en su tradicional mensaje de Navidad de este año "difícil y complicado para todos". El monarca, que ha calificado de "moralmente inasumible" la "elevada tasa de desempleo" que sufre el país, ha situado la lucha contra el paro como "objetivo último y cierto" y ha subrayado que "el camino de la recuperación no será corto ni tampoco fácil" y que "exigirá sacrificios". "Ciudadanos, instituciones y administraciones públicas debemos volcar nuestros mejores esfuerzos y energías en apoyo de los desempleados y de sus familias", ha dicho.

El mensaje, de 12 minutos y pronunciado en el salón de audiencias del Palacio de la Zarzuela, ha girado casi exclusivamente en torno a la crisis económica pero el rey también se ha pronunciado sobre otros asuntos. Así, el monarca ha expresado una vez más su solidaridad con las víctimas del terrorismo y ha pedido a ETA que entregue "sus armas asesinas" y desaparezca "para siempre".

Además, aunque sin mencionar expresamente la investigación sobre las actividades económicas de su yerno, el duque de Palma,  Iñaki Urdangarín,  el rey ha expresado su preocupación por la "desconfianza" de "algunos sectores de la opinión pública" respecto al crédito y prestigio de algunas instituciones. En esta línea, don Juan Carlos ha subrayado que "cualquier actuación censurable deberá ser juzgada y sancionada con arreglo a la ley" pero ha pedido que no se generalicen "comportamientos individuales" porque, de lo contrario, a su juicio, "se podría causar un grave daño a instituciones y organizaciones necesarias para nuestra sociedad".

El rey, que ha agradecido el interés de los españoles por su salud, "felizmente recuperada", también ha tenido palabras para ensalzar, según sus palabras, "el rigor y el acierto" del trabajo del príncipe de Asturias como heredero de la Corona "en el servicio a España y la defensa de sus intereses en todo el mundo".

Compromiso con el futuro de Europa

Don Juan Carlos ha hecho hincapié en la dureza de la "severa crisis económica" que sufre el país desde hace "varios años" y ha señalado que la situación "está llamada seguramente a modificar hábitos y comportamientos económicos y sociales". El rey, que se ha mostrado orgulloso de "las virtudes del pueblo español" ha señalado que ha llegado el momento de "reconocer con humildad los comportamientos en los que,  como individuos y como grupo hayamos podido equivocarnos".

El rey  ha pedido a los responsables políticos y a los agentes económicos y sociales que se empleen en "diseñar, desarrollar y aplicar un planteamiento global" contra la crisis que y ha subrayado que su papel como jefe del Estado es el de "animarles a trabajar sumando voluntades, con diálogo, altura de miras, rigor y convicción".

El monarca ha señalado que esta "crisis global" exige soluciones coordinadas porque ningún país podrá afrontarla en solitario y en esa lucha ha subrayado que en ese empeño, en el que se encuentra la UE, "Europa encontrará a España en la vanguardia, como actor destacado que desea seguir jugando un papel relevante". El rey ha subrayado que la "vocación europeísta de España"  gana "valor y peso" gracias a los lazos que unen a nuestro país "con las nacionaes iberoamericanas y nuestros vecinos de la orilla sur del Mediterráneo".

Tiempos de gran exigencia

En su discurso, el rey ha subrayado que "los actuales son tiempos de gran exigencia" pero ha confiado en que los "sólidos valores " y "un pasado reciente de superación" sirvan de estímulo para superar las dificultades.

"Hemos demostrado con creces" -ha dicho- "que cuando estamos unidos y seguros de lo que queremos sabemos dar respuesta a los retos más complejos". En esta línea, don Juan Carlos ha insistido en que "los españoles sabremos estar a la altura de los tiempos" y, para ello, ha ofrecido "el mayor y mejor hacer de la Corona".