La comunidad internacional condena "enérgicamente" los atentados en Nigeria
- Ban Ki Moon pide el final de la violencia sectaria
- Los fallecidos por el ataque ascienden a 27
El secretario general de Naciones Unidad, Ban Ki Moon, ha condenado "enérgicamente" los atentados perpetrados el domingo contra iglesias cristianas en Nigeria, que se han cobrado la vida de al menos 27 personas.
A través de un comunicado divulgado por su portavoz, Ban ha expresado "su solidaridad y sus condolencias al pueblo de Nigeria y a las familias que han perdido a sus seres queridos" en esta cadena de atentados.
Además, el surcoreano ha reiterado su llamamiento "al fin de todos los actos de violencia sectaria en el país" y "su firme convicción de que ningún objetivo puede justificar el recurso a la violencia".
El papa Benedicto XVI se ha sumado a los mensajes internacionales y ha hecho un llamamiento a serenidad y ha afirmado que la violencia "sólo conduce al dolor" y que el respeto, el amor y la reconciliación "son las únicos caminos para la paz".
El Pontífice ha hecho este llamamiento ante varios miles de personas que asistieron en la plaza de San Pedro del Vaticano al rezo del ángelus, en el que expresó su tristeza por la muerte de al menos 40 personas en los atentados islamistas contra varias iglesias católicas nigerianas el día de Navidad.
También el Consejo de Seguridad de la ONU quien ha condenado "en los términos más firmes los ataques terroristas ocurridos en Madalla".
Cumbre de seguridad
Por otro lado, el Gobierno de Nigeria ha anunciado que organizará una cumbre de seguridad nacional a principios del año 2012.
Según el diario nigeriano Vanguard, el presidente Goodluck Jonathan ha adoptado la decisión después de reunirse con los jefes de las fuerzas de seguridad y el Ejército en una reunión de urgencia celebrada el domingo con motivo de los ataques.
Los jefes de las fuerzas de seguridad nigerianas recomendaron al presidente que declare el año 2012 como el "año de la seguridad", para llamar la atención a la necesidad urgente de atajar la violencia, que solo en este mes se ha cobrado 65 vidas en explosiones y enfrentamientos armados.
El presidente Goodluck Jonathan ha condenado los atentados a través de un comunicado emitido a última hora del domingo, asegurando que el asesinato de inocentes en un día en el que millones de personas celebran el nacimiento de Jesucristo es un acto despiadado que merece el rechazo de todos los nigerianos de paz.
"Estos actos de violencia contra personas inocentes son un ataque injustificado a nuestra libertad y seguridad colectiva", afirma el presidente. "Los nigerianos deben unirse para condenar estos actos".
Reivindicación
El grupo islamista Boko Haram ha reivindicado la cadena de atentados. El más grave ha ocurrido en la iglesia de Santa Teresa de Madala, donde una bomba ha explotado coincidiendo con la misa de Navidad.
Horas después, otras dos explosiones han sacudido la iglesia de la Montaña de Fuego y los Milagros de Jos (centro) y una iglesia de Gadaka (norte). Además, dos artefactos han explotado en Damaturu (noreste), mientras que otros tantos han sido desactivados en Jos.
Esta cadena de atentados sigue a la del mes pasado en Damaturu y Potiskum (noreste), donde el grupo islamista explotó varios artefactos en iglesias, mezquitas y comisarías de Policía, provocando la muerte de al menos 65 personas.