Álvaro Pombo gana el Premio Nadal 2012
- El temblor del héroe es una obra en la que el autor habla de la indiferencia
- El escritor y periodista Rafael Nadal se lleva el Pla de prosa en catalán
El escritor santanderino Álvaro Pombo ha ganado el 68º Premio Nadal con su novela El temblor del héroe, una obra en la que el autor reflexiona sobre la indiferencia. La novela, presentada al premio bajo el seudónimo de Jorge Bruno y el título ficticio de Los amigos de Román, parte de la experiencia que vive un profesor universitario jubilado, que contempla un suceso, y que da pie a Pombo a hablar sobre la indiferencia en la sociedad.
"El inicio de este año está siendo bestial" ha declarado el escritor, miembro ya del selecto club de los ganadores del Premio Planeta y Nadal, que ha hecho un discurso en clave de humor en el que, como anécdota, se le ha caído el Premio, informa Luisa S. Albert de RTVE.es.
El Nadal tiene una dotación de 18.000 euros y el jurado estaba integrado por Germán Gullón, Lorenzo Silva, Andrés Trapiello, Ángela Vallvey y Emili Rosales.
Nacido el 23 de junio de 1939 en Santander y licenciado por la Universidad Complutense de Madrid en Filosofía y Letras , Pombo se encuentra entre los grandes de las letras hispanas del último cuarto de siglo y está considerado por la crítica como uno de los renovadores del realismo subjetivo, sus narraciones, aparentemente sencillas, están llenas de humor, costumbrismos y simbolismo, y beben de una tradición arraigada en su gusto por los clásicos de la filosofía y la literatura.
Rafal Nadal se lleva el Pla
En la misma velada literaria, que cada año supone la apertura de la temporada literaria, además del Nadal se ha fallado el 44º Premio Josep Pla de prosa en lengua catalana, ambos convocados por Ediciones Destino, y que ha recaído en el periodista Rafael Nadal por su obra Quan erem feliços, que son sus memorias de infancia en Girona.
Rafael Nadal (Girona, 1954) retrató en su anterior libro Los mandarines a 19 personajes influyentes del ámbito cultural, económico y político, desde su privilegiada atalaya que le brindó el haber sido director de El Periódico de Catalunya.
En la obra con la que ha ganado el Pla, Nadal continua escribiendo desde su propia experiencia, aunque en esta ocasión lo haga de su entorno más íntimo y familiar, los "felices" años de la infancia a los que alude el título del libro.
Tras hacerse público el fallo, Rafael Nadal ha explicado que "cuando todos tiran la mirada atrás llegan a un punto a partir del cual ya no recuerdan nada" y ese punto de inflexión es para el ganador cuando un año se quedó encerrado solo en el interior de una pastelería de Girona en época de Navidad, porque todas las estanterías y los escaparates estaban llenos de turrones, informa Efe.
Peripecias de una familia numerosa
Ha calificado sus memorias de "novela autobiográfica", basadas en las peripecias de "una familia de doce hermanos en la Cataluña de la posguerra, que va haciendo un recorrido por todos los paisajes infantiles, a veces de manera íntima, en otras de un modo cinematográfico".
En las páginas del libro, Nadal recorre los paisajes del casco antiguo de Girona, los veranos en la masia familiar o los largos cinco años de internado, que da como resultado "una mirada infantil hacia la pequeña burguesía de provincias", "en ocasiones ingenua, y en otras rebelde".
El punto final del libro se sitúa en una Verbena de San Pedro, cuando la tramuntana irrumpió en el escenario familiar y se llevó toda aquella vida.
Nadal ha tenido palabras emotivas hacia sus once hermanos, en especial a Toni, y hacia sus padres, que "espero recibirán con buen humor que los haya utilizado para escribir esta historia".
Nadal fue elegido director de El Periódico en mayo del 2006, en sustitución de Antonio Franco, y hasta aquel momento era asesor del Grupo Zeta para desarrollos audiovisuales.