La integración de Google+ en el buscador de Google, a debate
- El nuevo lanzamiento personaliza las búsquedas para cada usuario
- No está claro cómo afectará a la calidad del buscador, pero es opcional
- Hay quien considera que Google podría estar abusando de su posición
Tras el anuncio de Google de la integración de Google+ en los resultados de su buscador, varias son las cuestiones que se plantean tanto entre los internautas como en el mercado de las búsquedas y las redes sociales de Internet.
Lo que presentó ayer Google consiste básicamente en una priorización en los resultados de búsqueda de contenidos personalizados para cada usuario, especialmente de materiales obtenidos a través de Google+, la red social de la compañía.
De este modo, la estructura de amigos de la red social y el contenido que allí se comparte 'puntúa más alto' y es más fácil llegar a él; con las cosas que los amigos escriben, comentan o publican en sus cuentas en diferentes servicios sucede otro tanto.
“El contenido de Google+ 'puntúa más alto' y es más fácil llegar a él“
La primera cuestión es si esta personalización será realmente útil para los usuarios. Hay que tener claro antes que nada que esta búsqueda personalizada (a la que han llamado Search, plus your World) se puede activar y desactivar con un botón.
Pero también es bien sabido que la gente usará el valor que aparezca por defecto, y todo apunta a que las nuevas búsquedas aparecerán activadas para todos, y la desactivación será algo 'opcional'. (De momento, solo funcionan en Google.com y en inglés, pero pronto llegará a los Google internacionales).
Suposiciones arriesgadas
Google promociona las nuevas búsquedas como de mayor calidad basándose en ideas como que cuando uno busca prefiere darle prioridad a los contenidos de los amigos, a lo que ya ha buscado antes, a que consideramos la opinión de la gente de nuestros círculos más relevante que la del resto de personas o webs anónimas que hay en Internet o en que si hemos hecho una selección previa de webs para leer porque nos gustan, preferiremos encontrar contenido ahí.
Todas ellas son suposiciones arriesgadas, pues a veces precisamente lo que se está buscando es algo nuevo y diferente, algo acerca de lo cual los amigos no han podido ayudarnos o puntos de vista diferentes de los que solemos encontrar en las lecturas diarias.
Para otras personas, Google+ simplemente 'no es su mundo', o es algo diferente: un sitio donde charlar con los colegas pero no para usar para trabajar... y millones de usuarios del buscador simplemente no usan Google+. Estos no verán probablemente un gran cambio en sus resultados de búsqueda.
Seguramente habrá quien lo pruebe y quede enganchado para siempre y no quiera volver al 'Google tradicional' y quien lo encuentre poco práctico y haga clic sobre la opción de anular la personalización -lo importante es que esto puede hacerse fácilmente.
“Habrá quien lo pruebe y quede enganchado para siempre y no quiera volver al 'Google tradicional'“
Para Google, el buscador es sin duda uno de sus productos más importantes -no en vano la gente conoce a la empresa básicamente por eso- y pocas veces ha hecho cambios tan radicales como este.
La calidad de sus resultados será analizada con lupa, y aunque afortunadamente cuentan con excelentes herramientas para ello, deberán concentrarse en la satisfacción y la calidad percibida evitando tentaciones como dar por bueno un mecanismo simplemente porque beneficie a su propia red de servicios: sin duda el cambio generará un mayor número de altas en Google+, en páginas vistas, tiempo de navegación e ingresos de publicidad de su propia red.
¿Abuso de posición dominante?
La otra cuestión, que está rondando entre expertos y empresas del sector es hasta qué punto este movimiento de integración puede considerarse un abuso de posición dominante.
Cada vez que Google ha utilizado su buscador para impulsar con poderío nuevos servicios propios ha sido duramente criticado.
Hay quien defiende que está en su perfecto derecho de promocionar lo que quiera dado que es una empresa privada y no un servicio público, pero también hay quien cree que debido a su dominio del mercado de las búsquedas -ganado por méritos propios, buen trabajo y excelente calidad, todo sea dicho- debería ser vigilado más de cerca y que habría que pararle los pies ante ciertas actitudes.
En este caso concreto el hecho de priorizar su propia red social (Google+) sobre otras, podría dar un vuelco al mercado en los próximos meses o años, y afectar negativamente a gente que también se había trabajado duramente un hueco en el sector de las redes sociales.
Twitter ya se ha quejado de que le parecería mal que sus contenidos generados por usuarios, que son absolutamente en tiempo real y de calidad, quedaran relegados ante los del todavía incipiente Google+.
Sin embargo, alega Google, Twitter se negó a continuar con un acuerdo que mantuvieron durante un par de años, así que –dicen– tampoco debería comportarse como el perro del hortelano y más bien dejar de quejarse.
Ronda cierta sensación desde hace tiempo de que Google es el nuevo Microsoft y que debería ser 'atado en corto' por las autoridades para evitar abusos de posición dominante en terrenos tales como la publicidad o las búsquedas.
Pero el hecho de que no todo lo que lancen sea un éxito, por mucha promoción que le pongan, ha hecho que no se haya llegado a más todavía.
“El lanzamiento de las búsquedas personalizadas puede revolucionar un poco el patio de las redes sociales“
Tampoco parece que hayan causado la quiebra o caída en desgracia de terceros, de modo que no parece que el panorama vaya a cambiar mucho.
En definitiva, el lanzamiento de la nueva versión del buscador de Google con nuevos contenidos personalizados puede que revolucione un poco el patio de las redes sociales y aturda a los usuarios las primeras semanas debido al cambio, pero probablemente en uno o dos meses todo el mundo se habrá acostumbrado a la nueva situación.
En breve, para la mayor parte de la gente 'de a pie' todo será como siempre: el buscador tradicional al que han añadido 'más cositas' y que seguirán usando simplemente porque es el más práctico.