El naufragio del Costa 'discordia' indigna a italia
- Un error humano del capitán precipitó la tragedia del Costa Concordia
- Su salida del barco y las evasivas de la tripulación agravaron la situación
- El combustible en el interior del barco amenaza con envenenar el ecosistema
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Con 4.200 personas abordo, el comandante del crucero Costa Concordia desafió a la tecnología provocando una tragedia. Él mismo ha reconocido ante el juez que navegaba a vista porque conocía esos fondos. El error humano se perfila como la causa del accidente.
Ordenadores apagados y una aproximación excesiva a tierra trazaron el boceto de la tragedia.
Las aproximaciones a las islas son parte del espectáculo de un crucero. Pero esa nave nunca debió estar allí. A las diez menos cuarto de la noche del viernes 13 se produce la colisión. Hasta tres cuartos de hora después, el comandante no admite que tiene una via de agua. La orden de evacuación, aún tardará.
Evacuación que se hace esperar
El comandante Francesco Schettino no tomaba ninguna decisión. Tal vez para valorar los daños y no alarmar al pasaje, transcurrió más de una hora de inquietante y peligrosa duda.
El barco se inclina. La gente se apelotona en las barcas. No entran todos. Alguna barca se atasca, otra cae sobre la cabeza de los pasajeros que quieren salir de la nave.
El desconcierto tras el accidente se plasma en la conversación cuyo sonido original hemos escuchado entre capitanía marítima de de Livorno y el comandante de la nave Schettino.
Empieza con un requerimiento de identificación y la primera petición de que regrese a bordo. Hay gente atrapada, le dice. Coja un bote y vaya al lado derecho de la nave. Desde tierra le advierten de que esta conversación se está grabando.
El comandante Schettino parece aturdido. Hable más alto. Acerque la boca al micrófono, le interpela el comandante Falco desde tierra. El comandate de la capitanía marítima, visiblemente alterado concluye: usted ha abandonado la nave, ahora mando yo. ¡A bordo!
A esa hora había mucha gente en el barco, pero también en tierra que buscaba desesperadamente a los suyos.
Entre los fallecidos, hay un español. Guillermo Gual de 68 años. Había 177 españoles en el Costa concordia, entre pasajeros y tripulación. Desde el lunes, prácticamente todos están de vuelta en sus casas.
Indicios contra el capitán
Conforme pasan los días, la posición del responsable de la nave se vuelve más débil, criticable e inconsistente. A lo largo de esta semana hemos conocido que una joven moldava estaba con él. La pasajera ha asegurado a una televisión de su país que Schettino y ella ayudaron a salvar pasajeros.
La compañía se constituye en parte ofendida y se distancia del comandante. Costa Cruceros deja de prestar asistencia letrada Francesco Schettino. El fiscal ha recurrido por su parte el arresto domiciliario.
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