El Tesoro español logra cumplir en un mes el objetivo para todo un trimestre de 2012
- El Tesoro ha captado en enero un 29% de todo lo previsto para este año
- Los analistas señalan la inyección de liquidez del BCE como clave del éxito
- Creen positiva la iniciativa del FMI para ampliar el fondo de rescates
- Todavía no hay acuerdo sobre la quita de deuda a Grecia
Ver también: Especial sobre la crisis de deuda pública en Europa
El Tesoro español ha captado en un mes un 29% de todo lo previsto para este 2012 y a menor rentabilidad que en las emisiones anteriores. La última subasta de enero celebrada este martes ha terminado con la adjudicación de 2.500 millones de euros en letras a tres y seis meses, el máximo importe previsto y a un interés inferior. Los inversores han comprado 1.400 millones de euros en letras a tres meses con un interés del 1,33% frente al 1,88% anterior, y 1.106 millones a seis meses con una rentabilidad del 1,9%, inferior al 2,53% de la emisión precedente.
Cuando todo parecía ir en contra, tras la rebaja en la calificación de la deuda soberana de nueve países de la zona euro por Standard & Poor’s y las previsiones que apuntaban a la recesión, ahora confirmadas por el Banco de España, la demanda de títulos españoles ha triplicado la oferta. Países en situación opuesta a la de España en los mercados, como Francia y Grecia, también han tenido éxito en su salida a los mercados en las primeras semanas de 2012.
Con las cuatro primeras subastas, realizadas los días 12, 17, 19 y 24 de enero, son seis (contando las del 15 y 20 de diciembre pasados) las emisiones que han adjudicado más deuda del máximo previsto. La estrategia es acertada para el analista del IG Markets, Daniel Pingarrón, en un momento “razonablemente bueno”. El Tesoro ha adjudicado “el 29% de todo el dinero que pensaba subastarse este año”, porque, según el analista, teme el “posible recrudecimiento de las tensiones en los próximos meses”, señala a RTVE.es.
España salió con fuerza a los mercados en la primera emisión del año con la adjudicación de 9.986 millones de euros, en bonos a tres y cuatro años, con un interés ligeramente inferior al de la última emisión de este plazo, por debajo del 4%.
La segunda colocación de deuda del año, el 17 de enero, también fue buena. El Tesoro adjudicó 4.880 millones de euros en letras a 12 y 18 meses con un interés del 2,15% y el 2,49%, la mitad que en la anterior emisión de este plazo.
La clave del éxito en las últimas subastas del Tesoro español, es además para Daniel Pingarrón, la inyección de liquidez de 489.000 millones de euros a las entidades bancarias por el Banco Central Europeo el pasado mes de diciembre.
Mejores resultados en plazos cortos
Sin embargo, para este analista, la tercera subasta fue buena “aunque no tanto”, porque a pesar de superar la demanda a la oferta, se colocaron 6.600 millones de euros en bonos a cinco años y obligaciones a ocho y 10 años, estos últimos alcanzaron un interés del 7,088% muy superior al marcado por la prima de riesgo española, que se encontraba en 335 puntos en la apertura de la sesión, con un interés del 5,15%.
El diferencial se incrementó tras la subasta a 344 puntos con un 5,22% de interés, un entorno en el que todavía permanece y que según el analista de X-Trade Brokers, Juan Pedro Zamora, es "muy favorable", si lo comparamos con el máximo de casi 500 puntos que llegó a rozar en noviembre.
La misma valoración hace Pablo del Barrio, analista de X-Trade Brokers, al señalar que “en letras a corto plazo se han visto buenos resultados”, lo que apunta a que también podrán ser buenos en la subasta de letras a tres y seis meses programada por el Ministerio de Economía y Competitividad para este martes.
La tendencia, señala Daniel Pingarrón es que la subasta “sale mejor en plazos más cortos”.
Confianza de los mercados
Ambos analistas coinciden en asegurar que las medidas de austeridad fiscal que limitan el déficit en las cuentas de los Estados miembros de la zona euro dan más confianza a los inversores.
En el caso de España, estas medidas van dirigidas a reducir el déficit a un 4,4% este 2012, con medidas que recortan el gasto en 8.900 millones de euros y subida de impuestos. A pesar de que los gobiernos de la zona euro llaman ahora a acordarse también del estímulo de las economías con la creación de empleo, Daniel Pingarrón cree que “sí que es bueno” subir los impuestos para “controlar el spread” de deuda, es decir la rentabilidad que los inversores exigen por comprar la deuda pública.
Al buen comportamiento en los mercados de deuda se suma la reacción de las Bolsas europeas y Wall Street, que están experimentando subidas en estas primeras semanas del año y la confianza en que pese a las previsiones de recesión en la zona euro avanzadas ya primero por las agencias de calificación y después por el propio presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, los inversores esperan el crecimiento de las economías emergentes y también de EE.UU..
Efectos de la quita a Grecia
La falta de acuerdo sobre la quita a Grecia planea todavía sobre la confianza de los mercados, cuando los acreedores privados y los representates griegos todavía no han logrado un acuerdo sobre el interés que el Estado heleno deberá pagar a los bancos acreedores (fundamentalmente alemanes y franceses), por los nuevos títulos que reemplazarán a los actuales.
El objetivo es reducir la deuda griega en un 50% y los mercados ya han empezado a descontar que habrá acuerdo esta semana, con subidas en las Bolsas europeas.
Sin embargo, en caso de que las agencias crediticias declaren a Grecia en quiebra tras la quita "voluntaria" con los acreedores se podría "desatar una avalancha de ejecuciones de CDS (credit default swaps) cuyo alcance supera las fronteras europeas", señala la analista de IG Markets, Soledad Pellón. Las consecuencias, por tanto, en el caso de producirse esta situación son impredecibles si se tiene en cuenta la situación generada en 2008 por la quiebra de Lehman Brothers cuando se disparó la contratación de este tipo de seguros.
En cuanto a las próximas subastas previstas, el Tesoro celebrará la próxima puja el 14 de febrero, de letras a doce y dieciocho meses, y el día 21 de letras a tres y seis meses. El 2 de febrero se llevará a cabo una subasta de bonos y obligaciones cuyo plazo de vencimiento está aún por determinar.
Ya en el mes de marzo, el Tesoro celebrará una puja de letras a doce y dieciocho meses el día 20, mientras que el 27, será de letras a tres y seis meses.