El Ejército sirio controla los suburbios de Damasco tras dos días de enfrentamientos
- Al menos 55 personas han muerto este lunes, según la oposición
- Los desertores se han retirado tras llegar a 8 km del centro
- Soldados y policías se despliegan en la capital
- La oposición: siguen los choques a 5 km del aeropuerto de Damasco
Tropas del Ejército sirio han recuperado el control los suburbios de Damasco, donde este fin de semana se han librado enfrentamientos entre fuerzas leales a Bachar al Asad y desertores.
"El Ejército Libre Sirio (formado por desertores) ha hecho una retirada táctica. Las fuerzas del régimen han reocupado los suburbios y hacen arrestos casa por casa", ha informado a Reuters un activista que se hace llamar Kamal, quien ha hablado por teléfono desde el área del Al Ghouta, a las afueras de la ciudad.
Un portavoz del propio ELS ha confirmado la información desde Turquía. "Han llegado los tanques pero no saben donde está el ELS, aún operamos cerca de Damasco", ha declarado.
Confirmación del Gobierno
El Gobierno sirio también ha anunciado a última hora de este lunes que ha recuperado el control total de la periferia de Damasco y ha prometido que continuará la lucha contra los "grupos terroristas".
En un comunicado, el Ministerio del Interior ha dicho que sus fuerzas han realizado "en los tres últimos días una operación cualitativa en Duma, Harasta, Saqba, Hamoria y Kafar Batna, en la que persiguieron a elementos de grupos terroristas armados que cometieron asesinatos y secuestros y plantaron minas en las carreteras".
Asimismo, Interior agrega que sus fuerzas descubrieron "una cantidad de búnkers y túneles secretos" que supuestamente eran usados por los "grupos terroristas" para fabricar armas y almacenarlas, además de servir como lugares de secuestro.
En su nota, difundida por la agencia oficial Sana, el ministerio agrega que el gobierno, que envió este domingo tanques y vehículos blindados a las zonas de los combates, continuará persiguiendo a "los remanentes de estos grupos".
La ofensiva a gran escala cerca de la capital, que fue confirmada por los militares desertores, tuvo el objetivo de acabar con la presencia de los rebeldes agrupados en el llamado Ejército Sirio Libre en los alrededores de Damasco, que hasta el momento había permanecido relativamente al margen de las revueltas.
“ Esta operación se deriva del deber del estado de imponer orden“
"Esta operación se deriva del deber del estado de imponer el orden y eliminar el caos que estos grupos han tratado de imponer en la región, especialmente después de los llamamientos ciudadanos a restaurar la seguridad", asegura el Ministerio del Interior.
55 muertos este lunes
Este lunes, al menos 55 personas han fallecido, según los opositores Comités de Coordinación Local, que han informado de la muerte de 41 personas en la provincia de Homs, en el centro de Siria, siete en la de Deraa (sur), cinco en los alrededores de Damasco y otras dos en Idleb (norte).
Los desertores habían tomado varios distritos a tan solo ocho kilómetros del centro de la ciudad. En estas áreas se han registrado numerosas protestas durante los últimos 10 meses.
Un miembro de la oposición ha asegurado a Reuters que las mezquitas de la zona han sido transformadas en hospitales de campaña y que se necesitaba sangre para transfusiones. "Las autoridaes han cortado la electricidad. Las gasolineras están vacías y el Ejército impide que la población se abastezca de combustible para las calefacciones", explica.
"Es una guerra urbana, hay cadáveres en las calles", ha asegurado otra fuente desde el suburbio de Kfar Batna. En el centro de la capital, el Ejército y la policía se han desplegado en varias plazas.
Sin embargo, fuentes opositoras insisten en que los enfrentamientos entre las fuerzas del régimen y militares desertores del Ejército Libre Sirio (ELS) se han extendido en las últimas horas hasta las cercanías del aeropuerto de Damasco.
El "número dos" del ELS, Malik Kurdi, ha explicado a la agencia Efe que los choques se desarrollan desde ayer a 5 kilómetros del aeropuerto de la capital; información que también ha sido confirmada por una activista de la oposición que ha pedido el anonimato.
Es la primera vez que se registran enfrentamientos entre el Ejército del régimen y el ELS en los alrededores del aeropuerto, donde los disidentes tienen presencia en algunas zonas como Al Hotaita, ha señalado la activista.
De hecho, hay varias localidades en la carretera que conduce a las instalaciones aeroportuarias que están siendo escenario de combates, según la opositora.
Más víctimas mortales
Kurdi agrega que también se produjeron este lunes choques en el área de Al Guta, próxima a la capital; en la ciudad central de Homs y sus alrededores; en la provincia septentrional de Idleb y en Latakia, junto a la costa mediterránea.
Los opositores Comités de Coordinación Local apuntaron que la zona de Saqba, situada cerca de la capital, está siendo bombardeada con artillería.
Pese a que no existe un predominio claro de ninguno de los dos bandos en las cercanías de Damasco, el ELS asegura tener bajo su poder los barrios de Bab Amro y Bab al Sabea, en Homs, mientras que controlan una plaza principal de la ciudad de Idleb, capital de la provincia del mismo nombre.
El opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha informado de 41 civiles muertos en todo el país durante el domingo, incluyendo 14 en Homs y 12 en Hama. 31 soldados y miembros de las fuerzas de seguridad han perdido también la vida, la mayoría en la provincia de Idleb (norte), según esta fuente.
También este lunes, la televisión siria Addounia TV ha informado del ataque contra un gasoducto cerca de Telkalaj, en la frontera con Líbano. El ataque, que la cadena de televisión ha atribuido a "terroristas", ha provocado un escape de 460,000 metros cúbicos de gas. Estas informaciones no han podido ser contrastadas debido a las restricciones que el gobierno sirio impone a la prensa internacional.
Iniciativa árabe
La escalada de violencia ha llevado a la Liga Árabe a suspender el trabajo de sus observadores y ha urgir a Asad a que ceda el poder.
El martes, el jefe de la Liga, Nabil Al Arabi, hablará ante los representantes del Consejo de Seguridad de la ONU para buscar apoyos para un plan de paz árabe. Al Arabi espera vencer las resistencias de China y Rusia para una resolución dura con Siria.
El gobierno de Asad, por su parte, ha lamentado la iniciativa de la organización panárabe, a la que acusa de "presionar (al Consejo) con el objetivo de pedir una intervención extranjera y animar a los grupos armados a que aumenten la violencia".