Gallardón: Reformar la Ley del aborto es "lo más progresista que he hecho nunca"
- Extiende el calificativo de "progresistas" al resto de reformas judiciales
- "Ana Botella es lo mejor que le podía pasar a Madrid", dice el exalcalde
- Insinúa que modificar la negociación colectiva podría provocar la huelga
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha defendido este martes la reforma de la Ley del aborto para acogerse a la doctrina del Tribunal Constitucional (TC), ya que sostiene que la interrupción del embarazo "no podía suponer la desprotección de los derechos del no nacido", y ha asegurado que "defender el derecho a la vida es probablemente lo más progresista que haya hecho en mi vida política".
En el programa 'Los Desayunos de TVE', Gallardón ha extendido este calificativo de "progresista" al resto de reformas anunciadas por su departamento, especialmente a la eliminación de las cuotas partidistas en la elección de los miembros del CGPJ.
En materia de la reforma propuesta de la Ley del aborto, que supondrá recuperar la ley de 1985 y reintroducir la exigencia de consentimiento paterno para las menores, ha denunciado que, en su última reforma y actual ley en vigor, el Gobierno del PSOE "obvió" la protección de los derechos del nonato y que lo que se hará será fijar "supuestos" y no plazos.
Así, se podrá seguir abortando cuando se produzcan los tres supuestos contemplados en la ley anterior, violación, malformación del feto o riesgo para salud de la madre.
Además, se "corregirá otro error", ha dicho, el que una menor de edad pueda abortar sin permiso paterno, cuando se da la paradoja de que requiere ese consentimiento para hacerse un tatuaje o un 'piercing'.
Preguntado por las críticas de quienes denuncian que se ha vuelto reaccionario al convertirse en ministro cuando como alcalde implantó la píldora del día después, Gallardón ha sido tajante: "Probablemente lo más progresista que haya hecho en mi vida política es defender el derecho a la vida".
El titular de Justicia ha querido diferenciar la postura del Gobierno en este asunto con respecto a la Ley del matrimonio homosexual. Así, pese a que el PP presentó un recurso contra la última Ley del aborto todavía no resuelto, ha recordado que el TC ya se pronunció al respecto, dictó doctrina "y dijo lo que había que hacer", en el segundo caso aún no lo ha hecho "y se estará a lo que diga" el Constitucional.
El legislador interpretará la alarma social
Sobre la implantación de la prisión permanente revisable, ha dicho que será para delitos especialmente graves como el terrorismo o las violaciones y que deberá ser el legislador -Congreso y Senado- el que "interprete el sentir social" y determine qué casos tienen una mayor repulsa social.
El ministro de Justicia ha defendido que este tipo de pena, que ha reiterado que no es una cadena perpetua, lo que pretende es evitar el "riesgo que implica para la sociedad" una persona no rehabilitada y que sale a la calle, por lo que la libertad debe estar "supeditada a la rehabilitación" y a que se constate que no se va a reincidir, aunque ha apuntado que siempre con "unos mínimos y unos máximos" de años de cárcel.
Sobre el pago de una tasa judicial cuando se recurrra a una segunda instancia judicial, ha apuntado que se pretende "no cargar al contribuyente" con el exceso de ligitiosidad que ahora se da y que el importe se devolvería si el recurso prospera. De cualquier manera, ha defendido que no será unas tasas "disuasorias" que puedan suponer un quebranto económico.
Respecto a la renovación de los magistrados del TC, ha confiado en que esté "cerca", ya que el Gobierno está "a la espera de tener un interlocutor" en el PSOE tras la celebración de su Congreso Federal para comenzar a negociar los nombres de los futuros magistrados, que espera que no se decidan por un reparto según los votos obtenidos por cada partido.
Preguntado sobre el funcionamiento del Tribunal del Jurado, el titular de Justicia ha señalado que, aunque ha demostrado tener "elementos positivos", es necesario hacer una "reflexión sobre qué delitos tienen que ser juzgados" por esta institución.
Ana Botella, "lo mejor que le ha ocurrido a Madrid"
El exalcalde madrileño también ha defendido la gestión de su sustituta en el cargo, Ana Botella, de la que ha dicho que le gusta "todo lo que hace" y que es "lo mejor que le podía pasar a Madrid".
Según Gallardón, los madrileños no tienen porqué estar defraudados con él por haberse ido al Gobierno porque "salen ganando" con Botella, que es tiene "unas características excepcionales para ser una magnífica alcaldesa", a la vez que ha criticado los prejuicios "machistas" que hay sobre ella "por ser mujer de quien es", en referencia a su marido, el expresidente José María Aznar.
Preguntado por la polémica propuesta de la alcaldesa sobre los voluntarios y por el logo de la candidatura olímpica de Madrid, Ruiz Gallardón ha asegurado que "me gusta todo lo que está haciendo" y ha recordado que el anterior logo también la tuvo y que eso es bueno porque al final se habla de tema.
"Nadie quiere una huelga"
Sobre las palabras del presidente Mariano Rajoy asumiendo que la reforma laboral le va a costar una huelga, Ruiz Gallardón ha apuntado que "nadie desea que haya una huelga general y ojalá no la haya nunca", pero también ha reconocido que "la responsabilidad de gobernar no es siempre agradar, es hacer lo que necesita el país".
El ministro ha apuntado que uno de los aspectos que podría llevar a esa protesta por parte de los sindicatos es son los cambios que supondrá para la negociación colectiva. "Probablemente, uno de los aspectos consistirá en que tienen que desaparecer los mecanismos que alejan de los centros de trabajo la toma de decisiones", ha afirmado.
Gallardón ha recordado que "estamos en una situación de extraordinaria gravedad" y ha asegurado que el Gobierno "sabe cuáles son las necesidades de España" y está decidido a eliminar las "rigideces estructurales" y las "rigideces del mercado", con o sin el acuerdo de los agentes sociales.