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El asesino de la Pampa, un reptil gigante del tamaño de un león

  • Era un fiero reptil que vivió en Sudamérica hace 265 millones de años
  • En concreto han hallado un cráneo completo de unos 35 centímetros
  • Lo descubrieron en un yacimiento en Brasil gracias a Google Earth

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Ciencia al cubo

El nacimiento de perritos fluorescentes, la muerte de una chimpancé calva, qué son las neuronas espejo, el origen de los ojos azules o por qué nos salen canas. De la mano de América Valenzuela, en 'Ciencia al Cubo' pueden escuchar las historias más variopintas sobre temas científicos de actualidad. Emisión en Radio 5: Lunes a jueves a las 15: 42; Sábados 09:22 / 17:52 / 21:06; Domingos 09:22 / 17:55

Hace 265 millones de años vivía en lo que hoy es Sudamérica un fiero reptil del tamaño de un león.

Su aspecto era similar al de un lagarto gigante que andaba a cuatro patas con unas mandíbulas muy potentes y afilados dientes como cuchillos con los que cortaba y arrancaba la carne de sus presas mientras estaban vivas. Los científicos que lo han descubierto lo han apodado como el asesino de la Pampa.

Este animal fue descubierto en 2008 por un equipo internacional de paleontólogos dirigido por el salvadoreño Juan Carlos Cisneros. Es de la Universidad Federal de Piauí en Brasil y estos días el equipo presenta el análisis de los fósiles en la revista de Ciencias Americana.

Lo descubrieron en un yacimiento en Brasil gracias a Google Earth. Como la inmensa mayoría de Brasil está cubierta de vegetación, buscaron con esta herramienta los claros de los bosques.

Así descubrieron el yacimiento de la granja Boqueirao, que es donde se halló al reptil asesino, cuyo nombre científico es Pampaphoneus biccai.

Biccai es en honor al dueño de la granja, que se llama José Bicca. Y Pampaphoneus por el lugar donde está situada la granja, el estado de Pampa del Río Grande do Soul.

Un 'cabeza terrible'

En concreto han hallado un cráneo completo de unos 35 centímetros. Era un sinápsido, un reptil con forma parecida a la de los mamíferos actuales. Y dentro de estos a un dinocéfalo, o sea, un 'cabeza terrible'.

Tenían cráneos fuertes, llenos de rugosidades y refuerzos, preparados para los impactos

Estos animales tenían su cabeza llena de rugosidades y refuerzos. Eran cráneos fuertes, preparados para los impactos. Por eso, se cree que los machos se enfrentaban por el territorio o por las hembras peleando con la cabeza, como las cabras, por ejemplo.

Esta especie en concreto tenía además los incisivos entrelazados en forma de gancho y unos caninos largos y afilados. Debieron ser útiles para enganchar la piel y arrancar la carne de las presas que perseguía.

El asesino de la Pampa debió de ser sin duda uno de los depredadores más sanguinarios del cono sur.

CIENCIA AL CUBO

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