Más de la mitad de los trabajadores enfermos siguieron yendo a trabajar en 2011
- De las 18.121 enfermedades profesionales, el 49,2% supusieron la baja
- UGT denuncia que los afectados tienen miedo a perder el empleo
Más de la mitad de las personas que sufrieron una enfermedad profesional en 2011 siguió yendo a trabajar, según un estudio publicado por el sindicato UGT. La crisis ha provocado que, por primera vez en España, la mayoría de los trabajadores enfermos no se coja la baja.
En concreto, durante el pasado año se detectaron un total de 18.121 enfermedades profesionales, de las que el 49,2% supusieron la baja laboral del paciente. De esta forma, por primera vez las enfermedades tratadas en los servicios de salud que no recibieron baja superaron el 50% (50,8%).
“Miedo a perder el empleo“
La secretaria de Salud Laboral de UGT, Marisa Rufino, apunta que los trabajadores afectados no piden la baja al médico por miedo a perder su empleo; mientras que las mutuas podrían estar presionando a los facultativos para que sean más reacios a conceder la baja al trabajador.
El caso es que desde que comenzó la crisis el número de personas de baja por una enfermedad profesional se ha ido reduciendo, mientras que aquellos que están enfermos pero siguen trabajando ha aumentado.
La mitad de las bajas que en 2006
En 2006, el 85% de las personas que sufría una enfermedad profesional recibía la baja, mientras que durante el pasado año ese porcentaje ha bajado del 50%. De hecho, en los últimos seis años el número de bajas se ha reducido a menos de la mitad (un descenso del 51,8%), mientras que los casos en los que no se da la baja casi se han triplicado (182%).
Los 18.121 casos de enfermedades profesionales supusieron una media de 82 trabajadores diarios afectados. En cuanto al origen de las enfermedades, la mayor parte (el 82,6%) estuvieron causadas por agentes físicos, es decir, por malas posturas o la repetición de movimientos. Tras este tipo, las más frecuentes fueron las enfermedades de la piel (5,4%) y las causadas por inhalación de sustancias (4,8%).
Por edades, más del 50% de los casos registrados en 2011 los sufrieron personas entre 35 y 49 años. El colectivo más numeroso fue el de 40 a 44 años (3.085), seguido del de 45 a 49 años (2.968) y del de 35 a 39 (2.779).
Por otro lado, durante el pasado ejercicio hubo 11.981 declaraciones de enfermos con patologías no traumáticas asociadas al trabajo. Estos casos están recogidos por el Sistema Nacional de Salud (SNS) pero no tienen el reconocimiento de enfermedad profesional, por lo que su coste no está sufragado por la Seguridad Social a través de las mutuas de accidentes de trabajo sino por el SNS.
Enfermedades mentales, entre 150 y 372 millones de euros
De hecho, UGT reclama la inclusión de estas patologías en el listado de enfermedades profesionales, ya que considera que se está desviando el coste de estos pacientes. Según un estudio de la central sindical, solo los casos de enfermedades mentales ligadas al trabajo suponen al sistema sanitario entre 150 y 372 millones de euros.
En el caso de estas enfermedades del trabajo, el 61% afectan al aparato locomotor y el 17% a los sentidos, fundamentalmente a los ojos o los oídos, como esclerosis o daños en la retina.
Por último, el informe de UGT recoge el número de empresas que, debido al elevado índice de enfermedades profesionales, hicieron saltar el sistema de alertas. En concreto, durante el pasado año se registraron 89 casos, 17 más que en el ejercicio anterior.