Los grandes olvidados en los Goya
- 'Mientras duermes', de Jaume Balagueró, es la gran olvidada
- 'Los pasos dobles', pese a triunfar en San Sebastián, tampoco ha tenido suerte
Especial Premios Goya 2012
112 nominados a los Goya. Pero como todos los años, ni son todos los que están, ni están todos los que son. En esta lotería de las quinielas de premios cinematográficos, muchas veces injusta, siempre hay ausencias destacadas y presencias incomprensibles.
Y es que estos premios Goya, que se entregarán el próximo 19 de febrero, dejan a muchos en el olvido. Quizá habría que pensar (sobre todo en la categoría de mejor película, como hacen en los Oscar) en ampliar el abanico de nominados.
Mientras duermes, de Jaume Balagueró, ha sido la gran olvidada del año, un thriller espeluznante con una dirección impecable que habría merecido muchísimas más nominaciones que la incuestionable de Luis Tosar como mejor actor.
También es incomprensible que Eva, el sorprendente debut de Kike Maíllo (nominado a 12 premios) no esté nominada a mejor película. Pero está claro que el cine de género, como la comedia (la última nominada fue El otro lado de la cama, en 2003) no figuran entre los géneros preferidos por los académicos. Curiosamente, ambas películas se han repartido los premios Gaudí, del cine catalán.
Otras ausencias
Fuera ha quedado también la cineasta que el año pasado fue elegida para representar a España ante los Oscar, Icíar Bollaín. Katmandú: un espejo en el cielo sólo opta a mejor guión adaptado y mejor actriz, para Verónica Echegui.
Otra gran ausente es Los pasos dobles, de Isaki Lacuesta, que ganó -no sin polémica- el pasado Festival de San Sebastián, pero en las nominaciones sólo figura el documental hermanado con el filme en el que colabora el pintor Miquel Barceló, El cuaderno de barro.
También se ha echado en falta algún reconocimiento más para el drama sobre los abusos a menores No tengas miedo, de Montxo Armendáriz, que sólo se llevó la nominación de Michelle Jenner como mejor actriz revelación.
Es curioso que la película más taquillera del año, Torrente 4, de Santiago Segura, no tenga ninguna nominación, ni siquiera en los apartados técnicos. Afortunadamente tampoco ha prosperado la candidatura de Kiko Rivera (“Paquirrín”), el hijo de la cantante Isabel Pantoja, que aspiraba a actor revelación.
Tampoco ha tenido demasiada suerte el ex presidente de la Academia Álex de la Iglesia, cuyo nuevo trabajo, La chispa de la vida, solo ha sido nominado por el trabajo de sus protagonistas, el humorista José Mota y la mexicana Salma Hayek, que aspiran a mejor actor revelación y mejor actriz respectivamente.
Absurdos cinematográficos
La absurda norma de que los menores de 16 años no puedan optar al Goya ha privado de una posible candidatura a la joven protagonista de Eva, Claudia Vega, que realiza un sorprendente debut. La Academia debería replanteárselo urgentemente, antes de que algún chaval de 15 años nos deje con la boca abierta con alguna interpertación memorable y no se le pueda nominar.
La candidatura de Woody Allen, a mejor guión original por Medianoche en París, es un reconocimiento al genial cineasta pero también resulta claramente insuficiente para una película que no juega en la misma liga que las españolas.
Y es que lo de ser extranjero tampoco facilita la nominación al Goya; y es lo único que explica que Sam Shepard (uno de los grandes) no esté nominado por Blackthorn. Incluso Eduardo Noriega podría haber optado a un premio por su papel en esa película.
Y es que, un año más, hay gente que ha perdido el Goya incluso antes de que se entreguen los premios.