Venizelos afirma antes del Eurogrupo que algunos países quieren deshacerse de Grecia

• El ministro de Finanzas heleno cree que algunos están jugando con fuego
• Grecia asegura que las "cuestiones pendientes" estarán resueltas hoy
• El Eurogrupo mantendrá una videoconferencia sobre el rescate esta tarde

Venizelos: "Grecia está al borde del abismo", muchos quieren que deje el euro

La cancelación de la reunión del Eurogrupo prevista para este miércoles ha sido acogida con resentimiento por el Gobierno griego, que cree que algunos de sus socios europeos quieren deshacerse de Atenas, aunque mantiene que cumplirá con todas las exigencias de la troika -Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo y Comisión- para acordar el segundo rescate.

"Debemos decir la verdad al pueblo griego: desgraciadamente hay varios en la eurozona que ya no nos quieren y debemos convencerlos para las generaciones venideras, para nuestros hijos, de que podemos tener éxito", ha declarado el ministro de Finanzas griego, Evangelo Venizelos, instando a los griegos a luchar contra "la salida de Grecia de la eurozona, un escenario de terror". 

Venizelos ha asegurado que su país ya ha cumplido con la gran parte de las obligaciones de la troika para aprobar la ayuda financiera de 130.000 millones de euros, esencial para evitar la quiebra, y que las "cuestiones pendientes" quedarán resueltas antes de la teleconferencia que los ministros de Finanzas de la eurozona celebrarán esta tarde.

“El dilema está entre sacrificios o el desastre nacional“

"Grecia está al borde del abismo y estamos tratando de acordar los  detalles finales del nuevo programa del préstamo para el país", ha explicado  Venizelos al presidente, Karolos Papulias, según la agencia ateniense  ANA.

"Es muy duro. Muchos están jugando con fuego tanto en casa como  fuera, otros con antorchas y otros con cerillas. En cada instancia el  peligro es grande, y el dilema está entre sacrificios y recortes, o el  desastre nacional", ha añadido, describiendo así el clima actual que hay en Bruselas hacia Grecia.

De hecho, los ministros de Finanzas de la eurozona estarían barajando retrasar parcialmente el segundo rescate hasta después de las elecciones anticipadas de abril, según informa en exclusiva la agencia Reuters. De esta forma, la troika, escéptica sobre el compromiso con las medidas de austeridad del futuro Gobierno heleno, solo desbloquearía parte de la ayuda para que Grecia pueda hacer frente a un vencimiento de deuda el próximo 20 de marzo, pero esperaría a tener más garantías antes de comprometer el paquete de 130.000 millones de euros.

Compromiso de los conservadores

Mientras, el primer asunto pendiente para tener acceso al préstamo ya ha quedado resuelto. El líder del partido conservador Nueva Democracia, Antonio Samaras, y principal socio de Gobierno de Lukás Papadimos, ha entregado una carta a los acreedores privados internacionales en la que se compromete con las medidas de austeridad aprobados por el Parlamento heleno el pasado domingo, aunque incluye algunas condiciones.

Samaras, el favorito para ganar las elecciones anticipadas de abril,  afirma en la misiva: "Si Nueva Democracia gana las próximas elecciones (...) continuará comprometida con los objetivos y las bases políticas del programa, tal y como fueron descritas en el Memorándum y el Acuerdo Financiero (firmados entre la troika y el Gobierno griego)".

Con todo, en la carta el líder de la oposición advierte de que "se podrían requerir" modificaciones al programa ya que su partido considera que la "prioridad" es la recuperación económica. "Reiteramos nuestra intención de llevar estos asuntos al debate, junto a alternativas viables y estrictamente en el marco del programa, para no poner en peligro el cumplimiento de los objetivos del programa", explica.

La ausencia de esta garantía por escrito fue el motivo por el que el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, decidió aplazar la reunión presencial  al próximo lunes 20 de febrero.

Exigencia de más recortes

El otro punto por resolver es el recorte adicional de 325 millones de euros.  "Hemos hecho varias  propuestas a la troika (sobre las posibles partidas a recortar) y aún  estamos debatiendo  con ellos", ha explicado la fuente, que pide el  anonimato. Antes de conocerse la cancelación de la reunión del Eurogrupo, el  portavoz del gobierno Pantelis Kapsis, había asegurado al canal Antenna  que se retirarían de los "gastos ministeriales".

Unos recortes que se suman a los que el país viene aplicando en los  últimos dos años para evitar la quiebra, pero que son rechazados por la  mayoría de la población ya que han hundido al país aún más en la recesión.

Las críticas contra las draconianas medidas de ajuste han llegado también desde la propia Eurocámara, donde los eurodiputados han protagonizado este miércoles un acalorado debate. El parlamentario de Los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, ha tachado a los comisarios europeos de "talibanes neoliberales" por condenar al pueblo griego a "una presión inaceptable", a cambio de asistencia financiera.

"La troika agita los actos delictivos en Grecia para imponer cada vez más medidas de austeridad (...) No siempre se puede poner esta nación de rodillas", ha manifestado el eurodiputado alemán.

Grecia profundiza en su crisis

Eurostat, la oficina estadística comunitaria, ha revelado este miércoles que el PIB del país cayó un 7% en 2011, (lejos del objetivo del 5,5%). Y según recuerda Efe, desde 2010, el número de desempleados se ha duplicado hasta el 21%, los salarios se han reducido entre el 20% y el 30%, y los precios acumulan un incremento en una media del 10%. Todo ello ha provocado el empobrecimiento de la población hasta el punto de que ha aparecido un fenómeno olvidado en la UE: la desnutrición infantil. Los niveles de miseria no tienen precedentes.

Además del desbloqueo del segundo rescate (aprobado por la UE el pasado octubre) de al menos 130.000 millones de euros, Grecia necesita también urgentemente el visto bueno comunitario a su plan para la condonación de más de la mitad de la deuda en manos privadas. Sin ambas medidas, el país no podrá afrontar los vencimientos de deuda en marzo, y deberá declarar la bancarrota, una medida con consecuencias impredecibles en la eurozona

Según algunos analistas, la elevada presión a Atenas se dirige también, en última instancia, al resto de países con problemas de deuda.

Mientras tanto, continúan los actos de protesta contra la austeridad, y este martes por la mañana en Atenas varios centenares de jubilados rechazaron el recorte de las pensiones; y en la localidad de Agrinio (oeste) se han reproducido los disturbios que el domingo asolaron el centro de Atenas con el ataque durante la madrugada a varias tiendas y oficinas bancarias, informa Efe.