El hasta ahora preso más antiguo de España se compromete a luchar por la reinserción real
- Miguel Montes ha asegyradi que luchará por mejorar el sistema penitenciario
- Dejó la cárcel de Albolote el miércoles tras pasar 36 años ingresado
Miguel Montes Neiro, considerado hasta ahora el preso común más antiguo de España, se ha comprometido este jueves a luchar por quienes atraviesan una situación similar a la que ha vivido él con el fin último de que haya un sistema penitenciario basado en una reinserción real, porque el actual es "demencial".
En su primera comparecencia en rueda de prensa tras abandonar este miércoles la cárcel de Albolote (Granada), Montes Neiro, que ha dicho que no guarda "rencor", ha asegurado que, aunque "va a costar trabajo", quienes vivan una situación similar a la suya contarán con él.
"Voy a pedir que a todo el que lleva más de veinte años en la cárcel lo echen a la calle", ha señalado durante la comparecencia, en la que ha estado acompañado por su abogado, Félix Ángel Martín, y por el periodista Antonio Izquierdo, que escribirá su historia.
Su primera noche en libertad la ha pasado, como si fuera "una madraza", tapando a sus hijas y mirándolas cómo dormían: "Ellas en un colchón hinchable y yo en un sofá cama mirándolas dormir", ha relatado Montes Neiro, que asegura que ha dormido dos horas.
Su estancia en prisión
De su estancia en prisión ha dicho que "aquello está lleno de falsedad y mentiras", que la vida del preso bajo el actual sistema penitenciario es "cruel y demencial", y que allí solo se reinsertan los que tienen contactos y dinero: "Ojalá cierren las cárceles".
Por ello, ha considerado que "hacen falta personas que de verdad crean que puede existir la reinserción" y con él van a contar "para lo que necesiten", ha reiterado Montes Neiro, que no pedirá indemnización por los años que, cree, ha cumplido de más en prisión.
El exreo, que tiene 62 años y ha enlazado desde 1976 una veintena de condenas, ha asegurado que no delinquirá más y que no se la va a "jugar a cara o cruz", porque los días que le queden los dedicará a sus hijas y su familia.
"No voy a delinquir más porque no creo que merezca la pena. Con lo que sé hacer -piensa ejercer de ceramista y hacer esculturas- puedo darle de comer a mis hijas", ha señalado Miguel, que admite haberse equivocado "gravemente muchas veces", y aunque ha dicho que "si fuera necesario" pediría perdón "de rodillas" a las víctimas de sus actos delictivos, ha sostenido que a veces la víctima fue él.
Respecto a la posibilidad de que rueden una película sobre su historia, ha señalado que estará "pendiente de que no digan muchas tonterías".
Casi 400 personas en situación similar a Miguel Montes
Su abogado, que asegura que en la actualidad hay 376 personas con más de 34 años de prisión por delitos que no son de sangre, cree que Miguel es "la imagen de un fallo aterrador", se ha referido al "calvario jurídico" recorrido para que Neiro lograra la libertad y ha defendido una revisión del sistema penitenciario orientado a una reinserción real y efectiva.
Pese a que su cliente ha sido ya excarcelado, hoy ha recurrido una decisión del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria en la que denegaba a Neiro la liquidación de más de un centenar de días de prisión preventiva, para que se le reconozca que llevaban razón.
Por su parte, el periodista y amigo de la familia de Montes Neiro Antonio Izquierdo ha negado que en torno a este caso haya habido una "campaña de marketing", sino la batalla de una familia que ha sumado voluntades por su puesta en libertad y, según el abogado, "una lucha judicial brutal".