La Policía de Honduras investiga a un hombre como presunto autor del incendio de una cárcel

• El presidente de Honduras cesa a los responsables penitenciarios del país
• La OEA enviará una misión de derechos humanos para investigar las causas
• Decenas de familiares se han enfrentado a la policía para recuperar los cuerpos

Incertidumbre y desesperación en la cárcel hondureña

La Policía de Honduras investiga a un hombre que pudo haber provocado el incencio en la Granja Penal de Comayagua, donde este miércoles han muerto más de 350 presos. Según el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Héctor Iván Mejía, tienen información de una persona sospechosa, cuya identidad no ha sido revelada por motivos de seguridad.

El escueto informe del portavoz de la Secretaría de Seguridad coincide con el de los Servicios Especiales Preventivos. Ambos dicen que el autor material del incencio pudo ser un recluso que le prendió fuego a su colchón.

Mejía y un oficial del Cuerpo de Bomberos también han explicado que, en principio, se creía que el incendio pudo haber sido producto de un cortocircuito, aunque han añadido que serán los bomberos los que informarán de las causas al concluir su investigación.

El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, ha anunciado la destitución de los responsables de administrar las cárceles en el país y de los encargados de la Granja Penal de Comayagua para garantizar una investigación con "total transparencia".

El gobernante ha afirmado en un mensaje por cadena de radio y televisión que ha instruido con esas órdenes al secretario de Seguridad, Pompeyo Bonilla, quien, por su parte, ha afirmado que la causa del fuego ha podido ser un cortocircuito.

"Haremos toda la investigación para determinar qué fue lo que provocó esta lamentable e inaceptable tragedia y deducir las responsabilidades", ha dicho Lobo, quien además ha prometido ayuda a los más de 30 heridos en el siniestro.

El gobernante hondureño ha enfatizado que se hará "una investigación independiente con figuras de mucha autoridad moral con el acompañamiento y observación internacional" para garantizar "un proceso de total transparencia".

En su mensaje, Lobo ha expresado su solidaridad con los familiares de las víctimas.

Varios de los presos heridos en el incendio, según datos preliminares, ya han regresado a esta prisión tras ser atendidos en hospitales.

La OEA enviará a una delegación que investigue las causas

Una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) visitará Honduras para investigar las causas del incendio en la Granja Penal de Comayagua, según ha anunciado la Organización de Estados Americanos (OEA).

El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, ha solicitado a la presidenta de la CIDH, Dinah Shelton, que envíe a una delegación de la Comisión a Honduras para investigar "los sucesos que desembocaron en la tragedia carcelaria", ha indicado el organismo en un comunicado.

Esa delegación de la CIDH, entidad autónoma de la OEA que vela por el respeto a los derechos humanos, incluiría al Relator para las Personas Privadas de Libertad, Rodrigo Escobar.

Además, esa misión deberá presentar un "informe exhaustivo" al Gobierno hondureño y a la OEA sobre el incendio en la Granja Penal de Comayagua.

Indignación de los familiares

Decenas de familiares de los presos de la cárcel hondureña se han enfrentado con la Policía en un intento por ocupar la prisión para que les entreguen los cadáveres de las víctimas.

Los agentes del orden han disparado y han lanzado bombas lacrimógenas para contener la protesta contra familiares de los familiares, que les han arrojado piedras.

Numerosas personas han roto cercas y el portón del acceso principal de la prisióny han entrado, pero sin llegar hasta las celdas donde están los cadáveres, según ha podido constatar Efe. Los familiares se han opuesto a que sus muertos sean enviados a Tegucigalpa para la autopsia.

Una funcionaría de la Fiscalía, Daniela Ferrera, ha señalado que "la escena es terrible. Hay muchos cuerpos carbonizados que son irreconocibles".

La situación de violencia está controlada

La situación de violencia ha sido controlada, mientras Bonillla, acompañado de otras autoridades y la representante de un organismo de derechos humanos, ha intentado explicar a los familiares desde el interior de la prisión el procedimiento legal que se debe seguir.

"Yo entiendo el dolor de las familias pero hay que cumplir con lo que dice la ley", ha destacado el secretario de Seguridad.

Bonilla ha dicho que lo ocurrido en la cárcel "es una tragedia nacional", y ha anunciado que hacia las 16 horas se entregará un informe preliminar.

Las escenas en los alrededores de la Granja Penal son desgarradoras entre los familiares de las víctimas, según informa Efe.

Otros parientes de reclusos aseguran que las autoridades del centro penitenciario han demorado en abrir las celdas, lo que, han añadido, hubiera podido evitar que los presos murieran de hambre.