Seis muertos en el segundo día de protestas en Afganistán por la quema de coranes
- Karzai ha hecho un llamamiento a la calma
- La embajada de EE.UU. cierra sus puertas
Seis personas han muerto este miércoles por disparos en distintos puntos de Afganistán en la segunda jornada de protestas por la quema de ejemplares del Corán en una base de la OTAN. Decenas de personas han resultado heridas.
Dos manifestantes han perdido la vida en la provincia de Parwan, otro en la de Logar y otro en Kabul. En este último caso, testigos citados por Reuters aseguran que el disparo provino de un vehículo militar estacionado frente a una base extranjera, frente a la que se han reunido los manifestantes. Las fuerzas de la Alianza aseguran no tener constancia de disparos.
Los manifestantes han destrozado coches, han quemado un hotel y han gritado lemas como "Muerte a América" y "Muerte a Karzai". "Si los estadounidenses nos insultan a este nivel, nos sumaremos a los insurgentes", ha declarado Ajmal, de 18 años.
Otras protestas han tenido lugar en Jalalabad, en el este del país, donde los manifestantes han dado vivas al Mullah Omar, líder de los talibanes que permanece en paradero desconocido. "¡Larga vida al Mulah Omar!". gritaban. Según los medios de comunicación afganos, también ha habido movilizaciones en Herat.
Ante el desarrollo de las acontecimientos, la embajada de EE.UU. en Kabul ha decidido cerrar sus puertas y recomendar a su personal que no salga de sus casas.
Karzai hace un llamamiento a la calma
El presidente afgano, Hamid Karzai, ha hecho un llamamiento a la calma este miércoles tras una segunda jornada de protestas y ha instado a las fuerzas de seguridad para tratar de proteger las vidas y bienes civiles.
"Las protestas son un derecho de las personas, pero les pido a mis compatriotas que eviten la violencia", ha dicho en un comunicado en el que ha pedido a la gente que espere al resultado de las investigaciones, informa Reuters.
Tanto la OTAN como Washington pidieron perdón el martes por deshacerse "de manera inapropiada" de material religioso, incluyendo el libro sagrado musulmán. En 2011, una serie de protestas por el mismo motivo costó la vida de varias personas.