Tropas gubernamentales y etíopes toman el control del bastión de Al Shabab en Somalia

• La guerrilla ha abandonado la ciudad sin ofrecer resistencia

Tropas etíopes y somalíes han tomado Baidoa, ciudad del centro-sur de Somalia y bastión de las milicias islamistas de Al Shabab.

"Hemos tomado el control de Baidoa, sin un solo tiro", ha manifestado a Muhidin Ali, funcionario militar somalí, en una declaración telefónica. La misma fuente ha añadido que los milicianos de Al Shabab "habían huido de la ciudad antes de que nuestro ejército llegara".

"Estamos en el centro y nos movemos a diferentes partes de la ciudad para asegurar que tenemos el control total", ha añadido, según la misma agencia.

Por su parte, Adbulahi Hassan, un residente de la ciudad ha manifestado a la misma agencia que  “las tropas etíopes de Somalia y la policía han tomado  posiciones en la principal intersección de la ciudad".

Capturada desde 2009

Insurgentes Al Shabab habían capturado la ciudad en 2009, y se convirtió en uno de sus bastiones en el sur de Somalia, junto con la ciudad portuaria de Kismayo, el corazón económico de la rebelión islamista.

La guerrila islamista todavía controla otras zonas del sur y centro del país, aunque también está bajo presión por las fuerzas de Kenia.

Precisamente este miércoles, el Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado por unanimidad una resolución para aumentar las fuerzas de la Unión Africana en Somalia (AMISON), pasado de 12.000 soldados que hay en la actualidad a 17.731 hombres.

Estas tropas se componen, en la actualidad, casi totalmente de ugandeses y burundeses. Con esta ampliación, se deberán incorporar también soldados keniatas para que luchen en Somalia. 

Permenente guerra civil

Al Shabab, que controla buena parte del centro y sur de Somalia, combate contra las tropas del internacionalmente respaldado Gobierno Federal de Transición somalí y las de la Misión de la Unión Africana en el país para instaurar un Estado musulmán de corte wahabí en la zona.

Somalia vive en una permanente guerra civil y carece de un Gobierno efectivo desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país en manos de jefes tribales y "señores de la guerra", milicias islámicas e incluso de bandas de delincuentes armados.

A mediados de febrero, el número uno de Al Qaeda, Ayman Al Zawahiri, anunció la adhesión oficial de la guerrilla Al Shabab a la red terrorista, mientras el el líder de Al Shabab, Ahmed Godane, juró lealtad al líder de la organización.