Cameron anuncia apoyo internacional para un nuevo gobierno "representativo" en Somalia
- Asegura que el traspaso de poder será en agosto
- EE.UU. promete 48 millones de ayuda y sanciones a quien haga boicot
- Aumentarán el número de los efectivos de la Unión Africana en el país
El primer ministro británico, David Cameron, ha anunciado el apoyo de la comunidad internacional a un nuevo Gobierno "representativo" en Somalia, que tomaría el relevo de las actuales instituciones de transición.
Éste es uno de los siete puntos acordados en la conferencia sobre el futuro del país africano que se ha celebrado en Londres con la asistencia de representantes de más de 40 países y organismos internacionales, como el Banco Mundial o la ONU.
Al mismo tiempo, el Reino Unido facilitará unos 51 millones de libras (unos 60 millones de euros) en los próximos tres años para ayudar a los refugiados somalíes que han huido a Kenia y Etiopía.
Los participantes, entre ellos la secretaría de Estado estadounidense Hillary Clinton, han acordado además tomar medidas para combatir la piratería y el terrorismo en Somalia, país controlado en buena parte por la milicia al Shabaab, vinculada a Al Qaeda.
Las medidas acordadas
En una rueda de prensa posterior Cameron ha precisado que el nuevo Gobierno somalí, que sustituirá en agosto al actual de transición, estará formado "en un 30% por mujeres y todas las regiones estarán representadas" y "debe estar limpio de corrupción".
Ademas, se creará un Consejo de gestión financiera para supervisar que los activos del país africano se inviertan en el bien común, ha indicado el primer ministro.
Otro de los acuerdos surgidos de esta conferencia se materializó el pasado lunes con la aprobación por parte de la ONU de una ampliación de los efectivos de la misión de la Unión Africana en Somalia (Amisom), de 12.000 a 17.731 soldados, a propuesta de Reino Unido.
EE.UU. promete 48 millones de euros
Por su parte, Estados Unidos aportará 64 millones de dólares (48 millones de euros) en ayuda humanitaria para el Cuerno de África, según ha anunciado la secretaria norteamericana de Estado, Hillary Clinton, y ha propuesto adoptar sanciones contra quienes boicoteen la transición política en el país.
En su intervención al inicio de la reunión, la jefa de la diplomacia estadounidense ha subrayado la necesidad de ayudar a Somalia para mejorar la vida de la población, crear empleos, contar con medicamentos y luchar contra la piratería.
Clinton también ha destacado la creciente disposición de los países vecinos a colaborar en la detención de piratas que secuestran embarcaciones comerciales.
La secretaria de Estado de EE. UU. ha señalado que su país estudia la posibilidad de contar con una presencia diplomática permanente en Somalia después de décadas de conflicto, terrorismo y hambruna, y ha resaltado que hay una oportunidad de conseguir una paz duradera en esta nación del Cuerno de África.
Por su parte, el primer ministro británico, David Cameron, ha advertido de que si la comunidad internacional fracasa en frenar el caos en Somalia, esto pondría en peligro la seguridad mundial. Por ello, ha afirmado que es tiempo de ayudar a que este Estado fallido se recupere de una vez por todas.
Participación activa de las potencias extranjeras
En la apertura de una conferencia sobre como poner fin a dos décadas de anarquía en Somalia, Cameron ha reconocido que la participación exterior en el país había sido insuficiente y poco comprometida, porque pocos creían en el poder de las potencias extranjeras para resolver el conflicto.
"Ese fatalismo ha fracasado en Somalia. Y la comunidad internacional ha fracasado también. Hoy tenemos una oportunidad sin precedentes para cambiar eso", ha señalado en el encuentro en Londres, al que han asisitido, entre otros, Jefes de Estado y de Gobierno de África y los países árabes.
"Estos problemas de Somalia no solo afectan a Somalia, nos afectan a todos. En un país donde no hay esperanza, el caos, la violencia y el terrorismo prosperan. Los piratas están alterando las rutas vitales de comercio y secuestrando", ha indicado Cameron.
Somalia está inmersa en violentos enfrentamientos entre clanes y facciones rivales. Gran parte del país está controlado por los islamistas rebledes y los piratas secuestran buques en el Océano Índico y el Golfo de Adén y retienen a las tripulaciones hasta recibir un rescate.
"Las mentes jóvenes están siendo envenenados por el radicalismo, alimentadas por el terrorismo, que está amenazando la seguridad de todo el mundo. Si el resto de nosotros simplemente nos sentamos a mirar, vamos a pagar un precio por hacerlo", ha advertido Cameron.
El primer ministro británico se ha mostrado a favor de atender tres puntos vitales en Somalia: la seguridad, la ayuda humanitaria y la formación de un Gobierno representativo. "Somalia está cerca de alcanzar un nuevo acuerdo político en el que participen todos los somalíes y finalmente un nuevo Gobierno que rinda cuentas a las exigencias de su gente", ha agregado Cameron. También ha indicado que su país, Dinamarca, Noruega, Emiratos Árabes Unidos y Holanda establecerán un fondo que permita ayudar a las regiones a construir la paz.