Asad logra un "sí" abrumador a la nueva Constitución pese a la presión internacional
- Según los datos oficiales, ha obtenido un 89,4 % de aprobación
- La ONU y EE.UU. rechazan los resultados; Rusia los aplaude
- El Consejo de Derechos Humanos de la ONU debate otra resolución
- Francia pide que se prepare ya el juicio a Asad por crímenes de guerra
- Especial: Escenarios de la guerra en Siria
La artillería siria ha bombardeado de nuevo el área de Homs dejando decenas de muertos mientras el régimen sirio ha anunciado que los ciudadanos han apoyado de forma abrumadora la nueva constitución en el referéndum del pasado domingo pese a que ha sido rechazada por la oposición y por Occidente.
Mientras las potencias extranjeras discuten si armar a los rebeldes o llevar al propio Asad a los tribunales, el Ministerio de Interior sirio ha desvelado que la reforma de la Constitución, que abre formalmente el país a la democracia multipartidista pero que podría mantener al presidente en el poder hasta el 2028, ha conseguido un apoyo de casi el 90%.
De los cerca de 14,5 millones de personas con derecho a ejercer el voto, el 57,4 % participó en el plebiscito, según cifras difundidas por el Ministerio sirio del Interior, que ha añadido que un 9 % de los electores rechazó las enmiendas constitucionales.
En rueda de prensa, el general Mohamed Ashaar ha destacado que los ciudadanos participaron en la votación pese a que en algunas zonas recibieron amenazas por parte de supuestos grupos terroristas armados, en tanto algunos medios de comunicación lanzaron una campaña contra el proceso.
La nueva Carta Magna incluye como principal cambio la supresión del artículo 8, que estipula que el gobernante partido Baaz, en el poder desde 1963, es "el líder del estado y la sociedad".
Con el nuevo texto, redactado por una comisión de 29 miembros, otros partidos tendrán el derecho a designar a sus candidatos para la Presidencia, que queda limitada a un máximo de dos mandatos de siete años cada uno.
Esta enmienda entrará en vigor a partir de las próximas elecciones presidenciales, previstas para 2014, lo que permite que el presidente sirio, Bachar al Asad, quien ya lleva 12 años al frente del país tras tres décadas de gobierno de su padre Hafez, pueda seguir en el cargo durante 16 años más, hasta 2028.
La ONU le resta credibilidad; Rusia lo celebra
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ya ha restado credibilidad al referéndum constitucional celebrado en Siria al considerar que la situación de violencia y represión sobre el terreno deslegitima la consulta.
"Aunque una nueva Constitución y el fin del monopolio político del partido Baaz en el poder podrían ser parte de una solución política, un referéndum debe celebrarse en condiciones libres de violencia e intimidación", ha dicho ante la prensa el portavoz de Ban, Eduardo del Buey, en la sede central de la ONU en Nueva York.
En la misma línea, la portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Victoria Nuland, ha tildado de "un cinismo absoluto" el resultado de la consulta.
En cambio, Rusia, principal aliadod e Damasco, ha asegurado que el resultado del referéndum constitucional impide a la oposición -que boicoteó la consulta- arrogarse el derecho a actuar en nombre de todo el pueblo sirio.
"Es evidente que la influencia de los grupos opositores que llamaron al boicot de la consulta es limitada y no les concede el monopolio del derecho a actuar en nombre del pueblo sirio", ha defendido la Cancillería rusa en un comunicado.
Nueva resolución de condena
Ante esta situación el Consejo de Derechos Humanos de la ONU ha pedido una autorización del régimen de Damasco para las operaciones humanitarias que permitan asistir y socorrer a la población civil atrapada en la espiral de violencia que vive Siria.
A falta de elementos de presión contundentes contra Siria, el Consejo solo puede aspirar a una resolución de condena de la actuación represiva del régimen de Bacher el Asad -otra más- o a redoblar los llamamientos en favor de un final de la violencia.
Con Rusia y China ejerciendo su poder de veto en el Consejo de Seguridad en contra de acciones concretas contra el Gobierno sirio, a esta instancia de Naciones Unidas solo le queda hacer de altavoz y de foro de debate sobre el baño de sangre que sufre el país árabe.
Por eso, considerará este martes un nuevo texto de condena a Siria por "las sistemáticas violaciones de los derechos humanos" en una resolución que también urgirá a Damasco a autorizar la entrada de ayuda humanitaria.
El borrador del texto se ha elaborado por iniciativa de Turquía, país vecino especialmente preocupado por la espiral de violencia en Siria, y cuenta con el respaldo de Estados Unidos, de la Unión Europea (UE) y de la Liga Árabe.
El texto servirá de base al "debate urgente" convocado en el marco de la XIX sesión ordinaria del Consejo después de que la comisión independiente de investigación difundiera la semana pasada su segundo informe, en el que constató que los crímenes contra la humanidad cometidos para reprimir las manifestaciones antigubernamentales responden a una "política de Estado".
En el borrador se expresa "la grave preocupación por el deterioro de la situación en la República Árabe de Siria, en particular por las continuas violaciones de los derechos humanos y el uso de la violencia por parte de las autoridades contra su población".
Francia pide preparar el juicio a Asad
Más lejos ha ido el ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Alain Juppé, que ha instado a la comunidad internacional a "preparar desde ya las condiciones" para el procesamiento de la cúpula del régimen sirio en la Corte Penal Internacional por los crímenes perpetrados contra su población civil.
"Llegará el día en que las autoridades civiles y militares de Siria, y en primer lugar el presidente (Bachar) Al Asad, deberán responder por sus actos ante la justicia internacional porque ante tales crímenes no puede haber impunidad", ha declarado el representante francés en el Consejo de Derechos Humanos.
De forma contundente, reclamó a este foro condenar de manera clara "los crímenes odiosos" del Gobierno sirio, entre los que mencionó la masacre de civiles, el bombardeo de ciudades, la tortura de niños y la persecución de heridos incluso en los hospitales.
"Francia no se callará ante esos horrores que nada puede justificar", ha subrayado.