García-Margallo: a "lo más que puede aspirar" España es a que la CE rebaje el déficit en décimas

• El ministro de Exteriores apuesta por repartir el esfuerzo contra el déficit

García-Margallo: a "lo más que puede aspirar" España es a que la CE rebaje el déficit en décimas

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha reconocido este jueves que "a lo más que puede aspirar" España es a que se revise el objetivo de déficit por parte de la Comisión Europea en décimas. Por eso, ha subrayado que lo importante es que el déficit público se vaya reduciendo de forma paulatina "y no todo este año o el que viene".

“El Gobierno ha tenido que meter las tijeras a fondo“

Así lo ha asegurado García-Margallo en declaraciones a Los Desayunos de TVE, donde también ha reconocido que el Gobierno ha tenido "que meter las tijeras a fondo" para comenzar a reducir la deuda desde el primer momento.  "A todos los gobiernos les han dado 100 días y nosotros no hemos tenido ni 100 minutos", ha destacado el titular de Asuntos Exteriores.

Por este motivo, el titular de Exteriores ha apostado por "repartir el esfuerzo a lo largo de un calendario". "No se puede decir 'todo el esfuerzo hay que hacerlo este año' o ' todo el esfuerzo hay que hacerlo el año que viene'. Hay que ir graduando el tema", ha destacado García-Margallo, que ha explicado que "a medida que el esfuerzo es mayor la actividad económica se enfría, y cuando la actividad económica se enfría hay menos recaudación de impuestos, lo que acelera (la situación de crisis)".

“España es el país que en los últimos tiempos más se endeudó“

Dicho esto, García-Margallo ha señalado "administraciones, empresas y familias tienen que pagar las deudas" y ha destacado que "España es el país que en los últimos tiempos más se endeudó" y hacia sectores pocos productivos, como el 'ladrillo'.

Esa exposición al sector inmobiliario, precisamente, ha obligado a "reformar el sistema financiero, que estaba manga por  hombro, y a abordar una reforma laboral, discutible o no". "Pero es que no  hay otra opción", ha destacado el titular de Exteriores.

Se pedirán más sacrificios

Para pagar las deudas, García-Margallo ha destacado que la factura de la crisis hay que pagarla entre todos y de forma equitativa. "Lo  primero que hizo este Gobierno fue subir el impuesto de la renta, que  castiga fundamentalmente a la mayoría de votantes del PP. Hemos  congelado el sueldo a los funcionarios publicos, que en su mayoría son  también votantes del PP (...). Se ha intentado que el esfuerzo se reparta  forma equitativa".

“El tratamiento de  quimioterapia no es agradable pero nos va a permitir recuperar salud“

"La gente está pasando enormes dificultades y el porvenir que ven  inmediato es que se les va a exigir sacrificios", ha señalado el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación: "El tratamiento de  quimioterapia no es agradable, pero nos va a permitir recuperar salud".

En este sentido, García-Margallo ha solicitado más esfuerzos por parte del Banco Central Europeo (BCE). "Alguien tiene que comprar (deuda) y el único que tiene dinero, mientras no haya gobernanza económica, es el BCE", ha destacado.

Tomar medidas antes en Grecia

"La crisis es una enfermedad que empezó en 2007. Si se hubieran tomado medidas antes el tratamiento hubiera sido menos severo", ha señalado García-Margallo. Y ha puesto como ejemplo Grecia.

"Si se hubiese hecho antes, posiblemente la riada no hubiese llegado donde ha llegado. Ahora mismo la situación es que vamos a un segundo rescate a Grecia, tras varias madrugadas dramaticas (...) y hay quien dice que a lo mejor no sirve", ha destacado. En su opinión, lo que se tenía que haber hecho hace tiempo es "canjear los bonos griegos por otros a 30 años con cupón cero".

Preguntado por la canciller Angela Merkel, el ministro ha reconocido que su situación no es fácil. "Tener que decir a los alemanes que tienen que poner dinero es una operacion dificil: está remando en un ambiente dificil", ha señalado García-Margallo, para quien la idea de que los contribuyentes de los países del norte están pagando los excesos en el sur "es un mensaje que cala mucho" pero que es "totalmente injusto".