Sarkozy amenaza con suspender los acuerdos de Schengen si no se reforman
- Pide una "una reforma similar a la que se ha decidido para el euro"
- Lo ha dicho en un acto electoral ante más de 50.000 simpatizantes
- Los acuerdos de Schengen recogen el derecho de extranjero y de asilo
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha amenazado este domingo con suspender la aplicación en su país de los acuerdos de Schengen sobre la libre circulación de ciudadanos y mercancías en Europa si no se afronta una reforma profunda de los mismos para reforzar el control de las fronteras.
En un acto electoral para las elecciones presidenciales de abril y mayo próximos, en las que se presenta a la reelección, Sarkozy pidió que los acuerdos de Schengen sufran "una reforma similar a la que se ha decidido para el euro".
El presidente ha asegurado que si en un año no se han iniciado las conversaciones para reformar los acuerdos de Schengen, Francia si continúa en la Presidencia los suspenderá de forma unilateral.
Acto electoral
Ante más de 50.000 simpatizantes, el presidente ha señalado que "si en la situación económica y social actual Europa no controla las entradas en su territorio no podrá acoger dignamente a los que llegan y no podrá financiar su protección social".
Por ello, ha pedido el refuerzo y una convergencia de las fronteras europeas como la que se ha establecido sobre el euro y que los países que no cumplan el tratado puedan ser "sancionados, suspendidos o excluidos" de Schengen.
"Como en la economía, hacen falta instrumentos de convergencia reforzada en materia de derecho de extranjeros y de derecho de asilo", ha asegurado.
Sarkozy ha indicado que "es una cuestión urgente porque no se puede aceptar sufrir de las insuficiencias en el control de las fronteras exteriores de Europa".
"Los acuerdos de Schengen no permiten ya responder a la gravedad de la situación", ha dicho el candidato conservador, quien ha agregado que la gestión de la inmigración "no puede dejarse en manos de tecnócratas y de tribunales", si no que debe ser "la expresión de una voluntad política".
Por ello, ha pedido "un gobierno político de Schengen" similar al que se ha creado para el euro que imponga a cada Estado "una disciplina común en el control de las fronteras".
Cláusula para proteger los productos europeos
Además, ha solicitado "instrumentos de gestión de crisis que permitan asistir a los países que afronten circunstancias excepcionales y un frente común para luchar contra la inmigración clandestina".
El presidente francés también pedirá que se adopte una cláusula que proteja los productos europeos frente a los de otros países y que las pequeñas empresas de la región tengan prioridad en el acceso a los contratos públicos en Europa, similar a las que tiene Estados Unidos.
"Si en doce meses no se ha avanzado en este aspecto, Francia lo adoptará de forma unilateral", ha asegurado ante un público entusiasta.
"Europa ha abierto todos sus mercados y los otros no han abierto ninguno", según el presidente francés.