Enlaces accesibilidad

El gobierno de Chile recurre a una ley de la dictadura para reprimir una revuelta vecinal

  • Va a aplicar la Ley de Seguridad del Estado en Aysén
  • Los vecinos piden mejoras en las comunicaciones de la región 
  • Graves enfrentamientos entre carabineros y manifestantes

Por
El gobierno de Chile recurre a una ley de la dictadura para reprimir una revuelta vecinal

El Gobierno de Chile va a recurrir a una ley de la época de la dictadura de Augusto Pinochet para reprimir una revuelta vecinal en la región de Aysén, en la Patagonia.

"Se ha tomado la decisión de presentar en el día de mañana (por el viernes) un requerimiento por la Ley de Seguridad del Estado en virtud del artículo sexto de esa medida, tanto en Coyhaique (capital regional) como en Aysén", aseguró el jueves el ministro portavoz, Andrés Chadwick.

La Ley de Seguridad del Estado, promulgada bajo la dictadura militar en 1975 y cuyas últimas modificaciones fueron aplicadas en 2010, se refiere principalmente a la seguridad interior y exterior de Chile y su abanico es tan amplio que involucra a casi todo lo que altere el orden público.

Chadwick no quiso anticipar nombres de posibles personas a las que se responsabiliza de estos hechos, aunque aclaró que no se trata de aquellos que han estado por construir el diálogo "sino por destruir este diálogo y que no se lleve a cabo, y que han participado en hechos de violencia".

Graves incidentes

El ministro ha asegurado que los manifestantes, que exigen que se mejoren las comunicaciones con esta región, han quemado un microbús y un camión cisterna de la Policía, además de dañar un avión. "Estas situaciones son inaceptables y constituyen violencia grave, que altera por completo la paz social y la tranquilidad en la región", ha enfatizado. Más de 3.000 personas atacaron a un grupo de Carabineros en Coyhaique, a los que hicieron retroceder.

Los imputados por la Ley de Seguridad del Estado pueden recibir penas que van desde los 541 días hasta cinco años de presidio.

Con las protestas, que comenzaron el 13 de febrero, los vecinos de Aysén, de apenas 105.000 habitantes, piden medidas que mitiguen el aislamiento de esta región,  a 1.670 kilómetros de Santiago, con problemas de comunicación y dedicada a la pesca, la ganadería y el turismo. El portavoz del Movimiento Social por Aysén, Iván Fuentes, ha lamentado el fracaso de las negociaciones.