China deja de emitir el programa de entrevistas a presos que están a punto de ser ejecutados

• La medida parece estar determinada por la trascendencia del caso
• El programa fue autorizado por el "caracter moralizante" que tenía
• Más de 40 millones de espectadores chinos seguían el programa 

Las autoridades chinas han decidido dejar de emitir por el momento el programa 'Entrevista antes de la Ejecución', según han confirmado a RNE los responsable de la emisora.

Este espacio televisivo de la provincia de Henan, interrogaba a un condenado a muerte momentos antes de su ejecución. Más de cuarenta millones de espectadores, más de la mitad de la población de esa provincia, seguían este programa los sábados por la tarde.

La medida parece estar determinada por la trascendencia internacional que ha tomado el caso y después de que la BBC realizará un reportaje sobre el programa que presentaba la periodista Ding Yu. 

Esta profesional que ha dialogado con 225 asesinos, violadores, traficantes de drogas y otros convictos no se ahorraba insultos y críticas para los criminales que, aunque esposados y vestidos de color naranja, están frente a ella, cara a cara.

El programa fue autorizado por el “carácter moralizante” que según el gobierno tenía y como un llamamiento al orden para la ciudadanía. Desde el canal de televisión también se insistía en que si se avisaba de las tragedias “estas podían evitarse”. 

En China es un secreto de estado, pero según Amnistía Internacional en este país se llevan a cabo el 65% de todas las ejecuciones del mundo. Entre 3000 y 5000 según las fuentes consultadas. 

El gigante asiático contempla todavía en su código penal 47 delitos que pueden ser castigados con la pena de muerte.

En 2011 y después de 20 años sin revisión, se reformó el reglamento y se retiraron trece tipos de delitos castigados con la muerte que se aplica, según Amnistía Internacional, mediante inyección letal o disparo en la nuca.

"Limitar el uso de la pena de muerte"

En la pasada reunión de legislativo chino, clausurado el miércoles de la pasada semana, los responsables judiciales y de interior afirmaron ante la prensa oficial que China está comprometida con “limitar el uso de la pena de muerte”. 

Según la nueva Ley de Procedimientos Penales que se aprobó en esta reunión anual y a puerta cerrada, no se podrán utilizar las torturas para obtener confesiones y los interrogatorios de determinado tipo de delitos serán grabados para evitar abusos. 

No obstante para los sospechosos de delitos de terrorismo seguirán habiendo cárceles secretas o cárceles negras que seguirán otorgando todo el poder a la policía.

Esta nueva Ley también especifica algunos de los nuevos procedimientos a aplicar para la revisión de los casos de pena de muerte por parte del Tribunal Popular Supremo.