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El caso de los ERE y los recortes del Gobierno centran la campaña de las andaluzas

  • Rajoy ha arropado a Arenas cuatro días y Rubalcaba solo uno a Griñán
  • El copago sanitario, la reforma laboral y la huelga, presentes en la campaña
  • IU ha jugado con su papel de posible llave electoral

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Los candidatos en las elecciones andaluzas: José Antonio Griñán (PSOE), Javier Arenas (PP) y Diego Valderas (IU).
Los candidatos en las elecciones andaluzas: José Antonio Griñán (PSOE), Javier Arenas (PP) y Diego Valderas (IU).

El escándalo de los ERE fraudulentos y las decisiones judiciales al respecto -dos de los imputados están ya en la cárcel- y las medidas de ajuste del Gobierno central con una reforma laboral que será contestada con una huelga general el 29M, han centrado una campaña electoral de las elecciones andaluzas del 25M en las que está en juego el último bastión del PSOE y que el PP pinte de azul prácticamente todo el mapa autonómico.

Otros temas de debate nacional como el copago sanitario también han saltado al ruedo de una campaña en la que han tenido mucha presencia los líderes nacionales de los partidos, aunque con un matiz: mientras que el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ha respaldado y acompañado a su candidato, Javier Arenaselectorales; el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha esperado hasta el último día para aparecer junto al presidente andaluz y candidato a la reelección, José Antonio Griñán.

Las encuestas electorales han dado desde el arranque de la campaña la victoria al PP-A, en unos casos rozando la mayoría absoluta, como las publicadas antes de la campaña o la realizada por el CIS -daba al PP entre 54 y 55 escaños- o ya, en la recta final, otorgándole esa mayoría absoluta de 55 escaños en adelante a los 'populares'.

No obstante, Arenas, y el PP nacional, son prudentes sobre el resultado de esos sondeos y han luchado estos días para evitar que la euforia y la confianza pueda dejar en casa a algunos votantes. Por su parte, Griñán ha rebatido de forma constante esas encuestas y se ha esforzado en asegurar que los sondeos internos que maneja el PSOE, y lo que él mismo ha percibido a pie de calle, dicen que los resultados serán muy diferentes.

Los recortes de Rajoy

Con las encuestas en contra, Griñán ha utilizado como baza los recortes económicos del Gobierno de Rajoy para alertar del riesgo que supondría que Arenas llegara a la Junta de Andalucía, además de alertar de que el presidente del Ejecutivo central esconde en la manga más recortes para después del 25M, como la subida del IVA, la luz y otros impuestos.

También las críticas a la reforma laboral han sido constantes en la campaña de Griñán, que ha participado en algún acto electoral con los sindicatos UGT y CCOO. De hecho, la convocatoria de la huelga general se ha producido en plena campaña electoral de las autonómicas y la jornada de paro se producirá el 29M, solo cuatro días después de los comicios y con las urnas aún calientes.

El copago sanitario, que la Generalitat de Cataluña ha sacado adelante con el apoyo del PP, también ha sido utilizado de forma reiterada por el candidato socialista para arremeter contra Arenas, alertando de que el 'popular' lo impondrá si este llega a la Junta, lo que el líder del PP-A ha negado.

El escándalo de los ERE con cárcel incluida

La baza del PP-A en esta campaña electoral ha sido el escándalo de los ERE fraudulentos, que desde el primer día puso encima de la mesa y que las decisiones judiciales han mantenido muy vivo en estos quince días.

El mismo día 9 de marzo, fecha de inicio de la campaña, la juez instructora, Mercedes Alaya, decretaba el ingreso en prisión del ex director general de Trabajo de la Junta de Andalucía, Francisco Javier Guerrero. Una semana y media después la juez mandaba a la cárcel al exchófer de Guerrero, Juan Francisco Trujillo, acusado de 22 delitos.

Arenas ha arremetido una y otra vez contra Griñán por este escándalo y, aunque el presidente andaluz ha reiterado una y otra vez que él ha denunciado el caso a la Justicia, reconoce que le pasará factura electoral. Al final de la campaña, la condena por corrupción del exdirigente popular Jaume Matas, expresident de Baleares, le ha servido al PSOE para usar las mismas armas.

El candidato del PP también ha recurrido en la campaña a las altas cifras de paro de Andalucía -la más alta de España, con 1,2 millones de desempleados- y al desgaste de 30 años de Gobiernos socialistas en la comunidad.

IU, consciente de que puede ser clave

A lo largo de la campaña, ha estado presente también la posibilidad de un pacto electoral entre PSOE e IU si, como dicen algunas encuestas, el PP no lograra la mayoría absoluta.

El candidato de IU, Diego Valderas, es consciente de que su formación puede ser clave en la gobernabilidad de la comunidad andaluza, y también lo es Griñán, que en la recta final de la campaña ha puesto incluso condiciones a ese futurible pacto. Valderas, por su parte, ha dicho que primero habrá que escuchar el mensaje de las urnas.

El partido de Rosa Díez, UPyD, también ha puesto sus condiciones a aquellos que quieran buscar su apoyo para gobernar, aunque la alianza más natural en Andalucía sería con el PP.

Con Rajoy sí, con Rubalcaba no

El PSOE-A y el PP-A han enfocado de forma radicalmente distinta la presencia de sus líderes nacionales en la campaña y también el volumen de sus actos. Mientras que Arenas ha protagonizado cuatro actos con Rajoy y ha celebrado macromítines, Rubalcaba no coincidirá con Griñán hasta este viernes en el cierre de campaña y en el que será el primer y único gran acto electoral de estos quince días.

Así, Rajoy -que se ha turnado entre Andalucía y Asturias- ha apoyado a su candidato y amigo en el arranque de campaña en dos mítines, el día 9 en Málaga y el 10 en Almería y volvió a arroparle el día 18 en Cádiz. El presidente del Gobierno cierra este viernes la campaña en Sevilla, en el Pabellón de San Pablo, con su candidato, al que también han acompañado otros días la vicepresidenta, Soraya Saénz de Santamaría, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y varios ministros, con importante presencia de la cuota andaluza, que representan Fátima Báñez (Empleo) y Cristóbal Montoro (Hacienda).

Por su parte, Griñán ha huido de los grandes actos, y también de la compañía del secretario general del PSOE, aunque Rubalcaba sí que ha participado en varios mítines a lo largo de la campaña en tierras andaluzas, pero sin coincidir con su candidato.

No será hasta este viernes de cierre de campaña cuando Rubalcaba y Griñán compartirán atril, aunque será por partida doble: primero en Córdoba y luego en el cierre en Sevilla, en el que además será el mitin más multitudinario de los que celebren los socialistas, en el Centro Deportivo Parque Alcosa de Sevilla. También estará allí, porque tampoco ha estado antes en un solo acto de la campaña, el expresidente del Gobierno Felipe González. Desde el PSOE esta no coincidencia se argumenta con que se ha pretendido multiplicar las voces y la presencia en campaña, aunque detrás pesa el posicionamiento de Griñán a favor de Carme Chacón en el pasado Congreso Federal del PSOE.

También se ha evidenciado el distanciamiento de Griñán con el que fue su antecesor en el cargo, el expresidente andaluz durante 19 años Manuel Chaves, con el que no ha coincidido ni una sola vez y que ha tenido una presencia muy, muy baja en la campaña.

En la foto del cierre de campaña el que no estará tampoco será el otro "miembro de los Beatles", el exvicepresidente y diputado sevillano Alfonso Guerra, como llegó a definir a Guerra y a González el secretario general del PSOE cuando era candidato en las elecciones generales del 20N. Aquel fue el acto más multitudinario de la campaña socialista, con 30.000 personas en el velódromo de Dos Hermanas, el mítico escenario socialista que esta campaña no se ha pisado.