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James Cameron tras descender a las Marianas: "Era inhóspito, parecía la Luna"

  • Es el primero en descender en solitario al punto más profundo del planeta
  • Las Marianas están localizadas a casi 11 kilómetros de profundidad
  • El cineasta ha tenido algunos problemas que han dificultado el viaje

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James Cameron desciende a la fosa de las Marianas, el abismo del océano

"Era inhóspito, parecía la Luna". Estas han sido las primeras palabras de James Cameron tras emerger del histórico viaje submarino en el que se ha convertido en el primer hombre que ha conseguido bajar en solitario hasta la fosa de las Marianas, el punto más profundo del planeta.

Esta región, situada a casi 11 kilómetros de profundidad, solo había sido alcanzada una vez en la historia, en la década de los 60, por el teniente de la Marina estadounidense Don Walsh y el explorador suizo Jacques Piccard. 

Descender a la fosa de las Marianas es como subir el Everest y seguir 1,6 kilómetros en línea recta para que la distancia sea la misma. Cameron ha superado el reto, pero la misión se ha quedado a medias, ya que no ha logrado recolectar ninguna muestra biológica de esta inhósita región marina. 

"No he visto ningún pez, ni nada que pudiera tener señales de vida", explicaba el cineasta. A pesar de todo, las imágenes demuestran que estaba contento, satisfecho y radiante, y así se lo ha hecho saber a todas y cada una de las personas que esperaban su regreso a bordo del buque de exploración Mermaid Sapphire (Sirenita Zafiro), informa National Geographic.

No he visto ningún pez, no he visto nada que pudiera tener señales de vida

Estaba previsto que Cameron explorase la fosa de las Marianas durante unas seis horas, pero determinados problemas con el vehículo submarino Deepsea Challenger -en el que ha descendido- han obligado al cineasta a finalizar su misión antes de lo pensado.

El mini submarino, de siete metros de altura y un habitáculo de poco más de 100 centímetros de ancho, está equipado con brazos robóticos y cámaras para grabar toda la expedición. Pero una fuga de líquido hidráulico ha impedido que Cameron pudiera recoger alguna muestra para regresar con ella a la superficie.

Además, el cineasta ha explicado que perdió "un montón de propulsor, e incluso la capacidad de dirección del aparato. Por eso decidí subir antes. No podía hacer más, solo estaba dando vueltas". No obstante, Cameron es optimista: "Había que dejar algo para el próximo viaje".

A pesar de su "excelente" estado de forma, con 57 años de edad, los médicos confían que Cameron no haya sufrido ningún problema tras realizar el histórico viaje, ni los que tiene preparados en el futuro, aunque señalan que deberían pasar algunas semanas antes de que vuelva a intentarlo.