Los sindicatos "no se responsabilizarán" de lo que ocurra donde no se pacten los servicios mínimos
- Exigen a la CEOE y al Gobierno que no coaccionen a los huelguistas
- No hay acuerdo en la Administración Central del Estado ni en Justicia
- Tampoco se han pactado en, al menos, ocho comunidades autónomas
UGT y CC.OO. han señalado los sindicatos "no se responsabilizarán" de lo que ocurra allí donde no se hayan pactado los servicios mínimos y han exigido un compromiso público por parte de la CEOE, CEPYME y del Gobierno "de respeto a la libre voluntad" de los trabajadores y de "condena" a cualquier acto de coacción que comprometa su participación en la huelga general del 29 de marzo.
Así lo han declarado los secretarios de Organización de CC.OO., Antonio del Campo, y de UGT, José Javier Cubillo, en rueda de prensa en Madrid para informar de los acuerdos sobre los servicios mínimos y su aplicación en las comunidades autónomas. Según han remarcado, tras el acuerdo estatal en transportes y RTVE, no ha habido posibilidad de establecer servicios mínimos pactados ni en la Administración Central del Estado ni en la Administración de Justicia.
Tampoco en ocho comunidades: Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, País Vasco, Extremadura, Galicia, Baleares y Murcia. Asimismo, han indicado que el acuerdo de servicios mínimos sigue pendiente en Canarias y en Ceuta.
En algunas de estas comunidades, como es el caso de Galicia o Baleares, los sindicatos ya han presentado demandas de suspensión cautelar, y el resto no se quedarán sin su respectivo recurso.
Los sindicatos se plantean incluso presentar demandas por prevaricación en los casos "más abusivos" contra los cargos firmantes de dichos servicios mínimos, ha asegurado Del Campo.
Los dos dirigentes han denunciado que en aquellas comunidades en las que no ha habido acuerdos, la Administración ha actuado como "arietes y defensores" de la patronal.
Los sindicatos denuncian "presiones" de las empresas
Por su parte, Cubillo ha dicho que "agitar el árbol del miedo y recoger el fruto de los árboles que mueve la extrema derecha no es una buena tarea para nadie", y ha avisado de que "eso se acaba pagando" porque el día de la huelga es uno, pero luego hay "muchos más días".
En rueda de prensa, ambos representantes sindicales aseguraron que aunque el apoyo de decenas de miles de empresas y asociaciones permite prever que "el éxito está garantizado", lo cierto es que "es la primera vez que va a haber trabajadores que no van a secundar la huelga porque tienen miedo de hacer uso de su derechos constitucionales", en palabras de Cubillo.
Más aún, Del Campo ha leído un correo electrónico enviado por un trabajador en el que ponía de manifiesto coacciones por parte de su empresa de cara al 29-M y ha asegurado que las centrales reciben "bastantes" solicitudes de este tipo, sobre todo procedentes de trabajadores de pymes.
Según CC.OO. y UGT, una circular enviada por CEOE en la que se habla del carácter político de la huelga y se llama a los empresarios a no mantener una actitud pasiva el día del paro general, podría estar alentando estas prácticas entre los empresarios, de ahí su petición de renuncia expresa a las coacciones.
Los sindicatos mayoritarios han lamentado la falta de adhesión a la huelga general de los sindicatos de funcionarios y han valorado el proceso "paralelo" realizado por sindicatos como CGT o USO.