El Estado equilibra las cuentas de las empresas públicas y logra ganancias con Loterías

• El sector público prevé beneficios de 1.827 millones en las cuentas de 2012
• Las ganancias presupuestadas bajan, pero menos que la aportación estatal

El conjunto de las empresas públicas que cumplen servicios esenciales (Renfe, Correos, RTVE, puertos y aeropuertos...) se quedarán en 2012 al borde del equilibrio financiero, con unas pérdidas de menos de 70 millones en su conjunto, según el proyecto de presupuestos que incluye drásticos recortes. Si se contabiliza el resultado de Loterías, la ganancia total sería de 1.827 millones.

Así, el beneficio estimado de Loterías y Apuestas del Estado será de 1.895,7 millones de euros, según ha explicado el Gobierno en la presentación de los presupuestos generales del Estado (PGE) este martes. A esta lucrativa entidad, cuya privatización ha sido aplazada, le siguen en beneficios el grupo Puertos del Estado, con un beneficio previsto de 128 millones.

Detrás, Renfe Operadora prevé ganar 66,8 millones en 2012, lo que supondría el primer resultado positivo de su historia. Al igual que Renfe, el grupo Aena (aeropuertos) prevé dejar atrás las pérdidas y cerrar este año con un beneficio de 4,5 millones.

En el lado contrario, Adif (el gestor de las infraestructuras ferroviarias), prevé unas pérdidas de 295,4 millones y Correos y Telégrafos, de 164,9 millones.

En conjunto, y comparado con lo presupuestado en 2011, se prevén unos beneficios ligeramente inferiores (el año pasado se preveía un beneficio de 1.935 millones) y, en todo caso, nada comparable con el recorte general de las subvenciones por la prestación del servicio público que reciben la mayoría.

Por ejemplo, Adif ha visto recortada este año su aportación en 287 millones. En el caso de RTVE, donde se ha presupuestado un ligero beneficio, la partida de los PGE baja en 205 millones. RTVE.es no ha podido comparar los datos globales de aportación estatal ni los de todas las empresas porque Hacienda no ha ofrecido este martes datos homologables con respecto a las cuentas de 2011.

Estos recortes pasan entre otros factores por la congelación de sueldos de los trabajadores (a los que además se ha elevado la jornada) y la reducción de personal (no se renuevan las bajas) del conjunto de empresas y organismos públicos, según aprobó el Gobierno en su primer decreto el 30 de diciembre; también se ha limitado el sueldo de los directivos y, además, se ha aprobado una reesctructuración global del sector.