Llegan al menos 2.700 refugiados sirios a Turquía en 24 horas, según medios locales
- Se intensifica la llegada de personas que huyen de la violencia
- Las personas instaladas en los campamentos superan las 20.000
- Turquía ha abierto sus fronteras totalmente para los refugiados sirios
- Al menos 17 muertos este viernes a pesar de la misión de paz
La entrada de refugiados sirios a Turquía se ha intensificado en las últimas 24 horas, con la llegada de al menos 2.700 personas a través de la frontera, según datos de la emisora turca de noticias NTV que tiene varios enviados en la zona.
Por otra parte, la agencia de noticias Anadolu informa de que el ministro de Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, llamó de madrugada (a las 23.00 GMT del jueves) al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para comunicarle que el número de refugiados sirios alcanzaba los 2.500.
Según Davutoglu, en el lado sirio de la frontera se están produciendo intensas operaciones de helicópteros militares, agregó Anadolu.
Más de 20.000 refugiados
La Dirección de Catástrofes y Situaciones de Emergencia turca (AFAD) había informado este jueves de la llegada de 1.600 refugiados en 48 horas, con lo que ascendió a unos 21.000 el número de sirios acogidos actualmente en campamentos en Turquía, pero la oleada parece haberse intensificado en las últimas horas.
NTV relata que los refugiados llegan cargados de sacos y maletas, en tractores, motocicletas o minibuses.
Desde que el flujo de refugiados empezó en mayo del año pasado, Turquía sigue una política de puertas abiertas y acepta la entrada, sin formalidades y en cualquier punto de la frontera, de todos los sirios que desean salir de su país.
Los recién llegados son recogidos habitualmente por camionetas militares o ambulancias y trasladados a alguno de los siete campamentos establecidos en la provincia fronteriza de Hatay, en el sur del país eurasiático.
Más de 8.000 refugiados sirios fueron trasladados este jueves a una recién construida "ciudad" de casas prefabricadas en la vecina provincia de Kilis, y hay otra preparada para un número aún mayor en la provincia de Gaziantep, al nordeste de Hatay.
Más víctimas mortales
Al menos 17 personas han muerto este viernes en Siria, doce de ellas en la provincia central de Homs, en una nueva jornada de represión, pese a la presencia de los observadores de la ONU en el país, informaron los opositores Comités de Coordinación Local.
El grupo precisó que ocho de las víctimas en Homs, una de las provincias más castigadas por la represión gubernamental, perecieron a causa de los bombardeos de las fuerzas del régimen de Bashar al Asad contra distintos barrios de su capital homónima.
Los Comités agregaron que también hubo fallecidos en las provincias norteñas de Alepo e Idleb, y en Dir Zur, en el este, sin precisar las circunstancias de sus muertes.
La organización señaló, además, que se celebraron hoy protestas en diferentes poblaciones del país para pedir a la comunidad internacional que arme al Ejército Libre Sirio (ELS).
Misión de paz
Esos sucesos se producen en paralelo a la visita a Siria de un grupo de observadores de la ONU que, según este organismo internacional, llegaron ayer jueves, aunque, por el momento, no se confirmó esa información desde Damasco.
La delegación de la ONU tiene previsto analizar con las autoridades el futuro despliegue de una misión militar de supervisión y seguimiento para aplicar el plan de paz de seis puntos de Kofi Annan.
Esa iniciativa busca el cese de las hostilidades bajo supervisión de la ONU, la puesta en libertad de los detenidos en las protestas antigubernamentales y el envío de ayuda humanitaria, entre otros.
Por otra parte, el ELS anunció hoy que si el régimen pone en marcha un alto de fuego, antes del 12 de abril, de acuerdo con el plan de Annan, los soldados desertores cesarán también sus operaciones militares.