Los ataques de Asad más allá de sus fronteras aumentan la tensión en plena visita de Annan
- Un cámara ha muerto por disparos en la frontera con Siria
- Mueren dos refugiados que llegaron heridos a un campo de Turquía
- Human Rights Watch denuncia 100 ejecuciones en los últimos días
- Turquía cree que la fecha para aplicar el plan de Annan queda anulada
Los seis puntos de Annan
1. Diálogo político: establecer un "proceso político abierto, dirigido por los sirios" y designar a un "interlocutor" válido para todas las partes.
2. Fin de la violencia: alto el fuego efectivo bajo la supervisión de la ONU.
3. Ayuda humanitaria: coordinar una pausa diaria de dos horas para garantizar la entrega de ayuda humanitaria a todas las áreas afectadas por los combates.
4. Fin de las detenciones arbitrarias: multiplicar los esfuerzos para evitar detenciones arbitrarias y facilitar la comunicación y el acceso de los lugares de internamiento.
5. Libertad de prensa: asegurar que los periodistas pueden circular con libertad por todo el país y establecer una política de visa de no discriminación hacia ellos.
6. Libertad para los sirios: respetar la libertad de asociación y el derecho a la protesta pacífica.
Los ataques del régimen de Bachar al Asad han traspasado las fronteras con Turquía y Líbano y aumentan la tensión en la víspera de la visita del enviado especial de la ONU, Kofi Anann, a los campos de refugiados sirios instalados en Turquía.
Este lunes, un cámara de televisión libanés ha muerto en la zona de Wadi Jaled, fronteriza con Siria, por disparos procedentes del lado sirio, según la propia cadena. Horas antes, al menos tres personas han resultado heridas en Turquía por disparos provenientes del vecino país, según fuentes oficiales recogidas por las agencias internacionales y por el diario turco Hurriyet.
"Nuestro cámara Ali Shaaban, ha sido atacado cuando su equipo se encontraba en Wadi Khaled, en la frontera con Siria", ha dicho la directora de informativos de la cadena Al Jadeed, Mariam Bassam, a AFP. "Los disparos provenían de territorio sirio", ha añadido, según la misma agencia. Fuentes militares libanesas han confirmado a Efe la muerte del reportero.
La víctima, identificada como Ali Chabaan, de 31 años, se encontraba en el momento del disparo junto con otros dos periodistas, entre ellos, uno de la propia cadena, que han resultado ilesos, informa Efe. Uno de ellos, Husein Jreis, ha explicado en directo que soldados sirios dispararon contra su vehículo cuando circulaban por Wadi Jaled, donde se han refugiado miles de sirios huyendo de la violencia en su país.
Los tres periodistas lograron salir del coche, que tenia visible el nombre de la cadena de televisión, pero Chaaban resultó herido de gravedad y falleció en el hospital al que fue trasladado. Jreis ha denunciado que los militares sirios continuaron disparando contra el vehículo por lo que estuvieron tres horas en el suelo antes de que el ejercito libanés y los habitantes de Wadi Jaled pudieron socorrerlos.
Las autoridades libanesas han condenado la muerte de un cámara de televisión y han reclamado a Damasco que abra una investigación sobre este caso. En un comunicado, el primer ministro Nayib Mikati ha dicho que el Gobierno ha informado a las autoridades sirias de su "rechazo de ese acto inaceptable".
"Condenamos los disparos sirios sobre el equipo de periodistas libaneses", ha dicho Mikati, quien ha exigido "una investigación sobre esa agresión".
Los campos de refugiados en Turquía
Este incidente se ha producido horas después de que al menos tres personas hayan resultado heridas en Turquía por disparos provenientes de Siria. Los heridos son dos refugiados sirios y un traductor turco, que habrían resultado alcanzados en el interior del campo de refugiados de Oncupinar, cercano a la ciudad de Kilis, en la provincia de Gaziantep.
Según la agencia francesa AFP y la cadena de televisión estadounidense CNN, el suceso se ha producido cuando los habitantes del campo han visto que un grupo de refugiados intentaba cruzar la frontera, y han salido a ayudarles. Los soldados sirios han disparado contra este grupo y han continuado disparando contra el campo, atravesando las paredes de metal de las casas prefabricadas.
De acuerdo con AFP, un responsable del Ministerio turco de Exteriores ha llamado a su contraparte siria para pedir el cese del fuego. La televisión pública turca ha informado que las autoridades han reforzado la vigilancia de la frontera común.
En un incidente diferente, dos refugiados han muerto tras llegar a Kilis desde la provincia siria Alepo para recibir tratamiento médico, según ha explicado al diario turco Hurriyet el gobernador de la provincia, Yusuf Odabas. Otros 15 refugiados, provenientes de la ciudad de Sucu, están heridos.
Estos incidentes se producen un día antes de la visita prevista del enviado especial de la ONU, Kofi Anann, a los campos de refugiados sirios instalados en Turquía, en la misma jornada en la que vence el ultimatum para poner fin a las hostilidades, según un plan elaborado por el propio Anann y aceptado en principio por Siria.
Turquía y China piden más tiempo
Tras el tiroteo y al cruce de acusaciones entre el Gobierno sirio y la oposición, Turquía cree que la fecha del 10 de abril fijada para el alto el fuego ha quedado "en suspenso" y habrá que negociar otra, según el viceministro turco de Exteriores, Naci Koru. "La fecha del 10 de abril ha quedado suspendida. Desde mañana empezará un nuevo período de negociaciones", ha dicho Koru en Ankara, según la versión electrónica del diario Hurriyet.
Según el plan de Annan, este martes las autoridades de Siria debían retirar sus tropas de las ciudades y para el día 12 deben cesar todas las acciones de violencia, tanto de las fuerzas gubernamentales como de la oposición.
Sin embargo, este fin de semana Damasco a desafió a la ONU afirmando que no retirará sus tropas desplegadas en las ciudades sirias antes de obtener "garantías escritas" de la oposición comprométiendose a un alto el fuego, una exigencia que los rebeldes han asegurado que no están dispuestos a cumplir.
China, por su parte, ha exhortado al régimen de Damasco a que "honre" su compromiso del cese al fuego y ha apelado a la comunidad internacional a que dé más tiempo a la mediación de Kofi Annan en el país árabe.
En el interior del país, la violencia ha continuado este lunes. Según fuentes de la oposición, cerca de 80 personas han muerto en distintas zonas del país, la mayoría por el bombardeo del Ejército sirio contra varias poblaciones de la provincia central de Hama y de la septentrional de Alepo.
Los activistas de los Comités de Coordinación Local (CCL) han denunciado la muerte de al menos 30 personas en la localidad de Tal Rafaat (Alepo) y de 29 en la de Latamna (Hama), entre estos últimos 17 menores y ocho mujeres, aunque estas informaciones no han podido ser contrastadas por fuentes independientes.
Según datos de la ONU, desde el inicio de las protestas en Siria a mediados de marzo de 2011, más de 9.000 personas han muerto, mientras que más de 200.000 se han desplazado a otras zonas dentro del país y 30.000 se han refugiado en el extranjero.
100 ejecuciones, según HRW
Por otra parte, la organización de defensa de los Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW), en un informe publicado este lunes, ha denunciado que las tropas del régimen sirio y las milicias leales al presidente Bashar al Asad han llevado a cabo más de 100 ejecuciones en las últimas semanas.
El informe se basa en relatos de testigos de los combates en las provincias de Homs (centro) y en Idleb (noroeste) recogidos directamente por HRW, que asegura haber recibido información sobre otros muchos casos que no han podido ser verificados.
Los hechos narrados en detalle por Human Rights Watch se refieren a al menos 85 civiles: 25 fallecidos en ataques el 3 de marzo en Homs, 13 en la mezquita de Bilal en Idleb el pasado 11 de marzo y otros 47, en su mayoría mujeres y niños, entre el 11 y 12 de marzo en varios distritos de Homs.
Uno de los testimonios es de un residente del barrio de Baba Amr, el corazón de los bombardeos en Homs. Según HRW, relata cómo el 2 de marzo varios hombres obligaron a cuatro vecinos a salir de sus casas y les mataron a cuchilladas en presencia de sus familiares. Luego, les dispararon en la cabeza. Uno de ellos era su hermano.
HRW también hace un recuento de al menos 16 ejecuciones sumarias a combatientes rebeldes, a los que dispararon a quemarropa después de haber sido capturados o heridos, y expresa su preocupación por la existencia de "una política, oficial o no, de no hacer prisioneros" .
"En un desesperado intento de aplastar la revuelta, las fuerzas sirias han ejecutado a personas a sangre fría, tanto civiles como combatientes rebeldes", denuncia Ole Solvang, investigador de Human Rights Watch. "Lo hacen en plena luz del día, ante testigos, obviamente, sin preocuparse por si algún día tendrán que responder por sus crímenes".
El derecho internacional prohíbe sin ambigüedades las ejecuciones sumarias" y "matar deliberadamente a soldado heridos o capturados constituye un crimen de guerra", puntualiza HRW, que pide la intervención de la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya.