Esperanza Aguirre propone a Rajoy un pacto con el PSOE para reducir el estado autonómico
- La presidenta de la comunidad de Madrid se ha entrevistado con Mariano Rajoy
- Aguirre cree que la situación económica exige "medidas profundas"
- Ve fracasado el estado autónomico, que ha derivado en 17 miniestados
Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha propuesto este martes al presidente del Gobierno que se convoque al PSOE para llegar a un acuerdo en la dirección de "adelgazar el estado de los autonomías". España "no puede permitirse el lujo" de mantener la existencia de 17 miniestados, ha asegurado.
En este sentido, Aguirre se ha manifestado abierta a devolver competencias como la educación, la sanidad y la justicia. Asegura que es la vía para terminar con las "duplicidades, triplicidades y multiplicaciones", lo que supondría una medida de ahorro que la presidenta ha cifrado en 48.000 millones para todo el Estado, en un momento en el que se necesitan "medidas profundas" para una "reducción drástica del déficit".
Aguirre cree que las crisis son buenos momentos para reformas de calado, " de acabar con lo supefluo y potenciar lo imprescidible". Por eso ha dirigido sus orientaciones hacia la reducción drástica del gasto, y también hacia que la administración cese en sus políticas de subvenciones. La presidenta madrileña afirma que tanto "partidos políticos, sindicatos, patronales como rentas altas" deben sostenerse por sí mismos.
En opinión de Aguirre, el sentido original de la autonomías era integrar a los partidos nacionalistas y el paso del tiempo ha favorecido lo contrario, en su opinión, una vez que se instauró "el café para todos" y el hecho diferencial quedo diluido.
Se opone al copago, por ser poco rentable
En rueda de prensa, la líder de los populares madrileños ha asegurado que no ha acudido a la Moncloa para hablar de localismos. Ha dicho a los periodistas, que la hora y media de entrevista con el presidente del Gobierno la han dedicado a hablar de la situación económica y política de España, que para Aguirre es gravísima aunque cree que Rajoy no trabaja con la perspectiva de una "intervención".
Aún así, ha rechazado interpretar el sentido de las respuestas de Mariano Rajoy y tampoco los proyectos que manejen los ministros. Sin embargo, no ha eludido la polémica sobre el copago sanitario, del que se ha vuelto a manifestar en contra, porque considera que el coste administrativo de su implantación y desarrollo es mayor que la recaudación que pudiera producir.
Mariano Rajoy ha emprendido una ronda de contactos con los presidentes autónomicos. Precisamente uno de ellos, José Antonio Monago, se ha mostrado también abierto este martes a un pacto con todos los partidos políticos y todas las autonomías, para lograr la sostenibilidad del sistema autonómico.
Cree que sanidad y educación tendrá reformas legislativas
La presidenta ha asegurado este martes que no cree que el Gobierno vaya a hacer recortes en educación y sanidad, sino que emprenderá "reformas en la legislación".
Aguirre ha precisado que actualmente las comunidades autónomas tienen que asumir unos gastos que, a su juicio, "no tienen mucho sentido" y ha puesto como ejemplo la Formación Profesional o el Bachillerato, que no son enseñanzas obligatorias.
Así, ha explicado que en Sanidad, en el caso de la Comunidad de Madrid, todo lo que se refiera a la salud y a la curación de enfermedades será "universal, gratuito y de la máxima calidad", frente a otro tipo de prestaciones que se pueden revisar. También ha apuntado que en la Constitución se establece que la Educación básica, de los 6 a los 16 años, es obligatoria y gratuita, pero no otro tipo de enseñanza.
"Hay un decreto del tiempo de Felipe González que dice que el Bachillertao y la Formación Profesional es gratuito. Eso no es formación básica. No digo yo que hay que cobrar lo que cuesta, pero que los contribuyentes sigamos pagando el 90% de lo que cuesta un máster en una universidad pública no tiene ningún sentido", ha aseverado.
Por ello, ha dicho que es "partidaria" de reducir el gasto público "de una manera drástica" y ha puesto como ejemplo el caso de Irlanda, para evitar que España se vea abocada "a una situación todavía más difícil" que la que presenta actualmente.